El presidente Barack Obama instó hoy al Congreso a tramitar con urgencia la reforma del sistema de salud de Estados Unidos, cuyos crecientes costos amenazan con producir un colapso fiscal, según advirtió.

En su habitual discurso de los sábados, Obama dijo que la reforma debe ser "real" y asegurar que se proporcione atención médica asequible y de calidad a cada estadounidense por cuanto "es una necesidad que no puede esperar".

La transformación del sistema para reducir los costos médicos, ampliar la cobertura a todos los estadounidenses y permitir que cada quien escoja libremente sus médicos y planes de salud, fue una de las promesas electorales de Obama el año pasado y es una de sus máximas prioridades legislativas.

Obama se dirigió a los estadounidenses en momentos en que culmina una gira por el Oriente Medio y Europa, uno de cuyos principales objetivos fue un acercamiento con el mundo musulmán.

"Pero aun mientras estoy en el exterior, continúo enfocado en los otros acuciantes desafíos que enfrentamos, incluyendo la urgente necesidad" de cambiar el sistema sanitario, dijo.

El presidente advirtió: "Si no hacemos nada, la salud de todos estará en peligro. Dentro de una década, por cada cinco dólares que ganemos gastaremos uno en salud".

"Reformar el sistema sanitario ya no es un lujo... es una necesidad que no podemos seguir postergando", insistió.

A comienzos de mes, la Casa Blanca divulgó un estudio del Consejo de Asesores Económicos que indica que la transformación en este sector aumentaría el crecimiento económico en más del 2% en 2020 y casi un 8% en 2030, si se logra reducir en 1,5 puntos porcentuales la tasa de crecimiento anual de los costos de salud.

Las familias estadounidenses se beneficiarían directamente, ya que, según ese mismo estudio, los ahorros en costos médicos producirían un ingreso adicional de 2.600 dólares para una familia de cuatro miembros para el año 2020, o de cerca de 10.000 dólares para 2030.

Obama dijo que indicó al Legislativo que se deben reducir costos, mejorar la calidad y proteger al consumidor.

Pero "también dejé claro al Congreso que debemos desarrollar un plan que no aumente el déficit presupuestario", finalizó.