El presidente de EE.UU., Barack Obama, afirmó hoy que su decisión de enviar 30.000 soldados más a Afganistán ha sido la más difícil de su mandato y aseguró que se verá en un año si su estrategia arroja los resultados deseados.

En una entrevista en el programa "60 Minutos" de la cadena de televisión CBS, dijo que los mandos militares deberían saber "a finales de diciembre de 2010" si su nueva estrategia en Afganistán cumple los objetivos fijados en términos de desplazar a los talibán de las zonas pobladas y garantizar la seguridad en esas comunidades.

"Si la estrategia recomendada no funciona, cambiaremos el enfoque", señaló Obama en la entrevista, que fue grabada la semana pasada en la Casa Blanca antes de que el presidente viajara a Europa para recoger el premio Nobel de la Paz en Oslo.

Bajo la estrategia del presidente de EE.UU. los 30.000 soldados estadounidenses adicionales comenzarán a retirarse de Afganistán en julio de 2011, fecha que fijó para transmitir a los afganos que el compromiso de Washington no dura indefinidamente.

Obama dijo creer que hay ciertos elementos en Afganistán que se sentirían "perfectamente satisfechos" con convertir al país en un "protectorado permanente de EE.UU. en el que no asumen ninguna carga".

El presidente de EE.UU. reiteró que a partir de julio de 2011 comenzará una fase de transición para entregar la responsabilidad a los afganos, y que la decisión sobre cuántos soldados, cuándo y cuán rápido se retirarán de Afganistán será determinado en base a las condiciones sobre el terreno.

El mandatario difirió además con aquellos analistas políticos que consideraron su tono en el discurso del 1 de diciembre, cuando anunció la estrategia, de académico y carente de emoción.

"Ése fue probablemente el discurso más emotivo que he pronunciado, en términos de cómo me sentía", señaló, para agregar que fue porque habló ante cadetes, de los que algunos serán destinados a Afganistán y desde donde otros quizá no vuelvan.