La ola de frío y nieve que afecta a Francia y gran parte de Europa desde hace varios días mantiene en alerta naranja a 18 departamentos franceses frente a los 50 que estaban en esa situación el domingo, anunciaron hoy los servicios meteorológicos galos.

Entre los departamentos que continúan en alerta figura el de Ile-de-France, donde está la capital francesa, y los del noroeste del país.

Aunque las previsiones de los servicios meteorológicos de Méteo France indican una mejoría, el temporal provoca graves problemas en el tráfico por carretera, ferroviario y aéreo.

Los trenes de Eurostar, que unen Francia con Gran Bretaña por el túnel del Canal de la Mancha, continúan suspendidos debido a las averías detectadas en varios convoyes, provocadas por la fuerte nevada del fin de semana.

Miles de personas se quedaron bloqueadas durante el fin de semana en la estación, a la espera de que se restableciera el tráfico.

En el transporte de cercanías, a las perturbaciones provocadas por el temporal se añaden las de la huelga de conductores de trenes en una de las líneas que une la capital francesa con la periferia y las generadas por el descarrilamiento de un tren en otra, que ha provocado 17 heridos leves.

Por lo que se refiere al tráfico aéreo, en el aeropuerto parisino de Charles de Gaulle (CDG) esta mañana se ha anulado en torno al 20 por ciento de los vuelos por recomendación de la Dirección General de la Aviación Civil (DGAC).

La DGAC aconsejó a los pasajeros que tengan programados vuelos al aeropuerto norte de París que se pongan en contacto con las compañías aéreas antes de acudir al aeródromo.

Y en las carreteras, la nieve y las placas de hielo han aumentado el riesgo de accidentes, según las autoridades, que apelan a la prudencia de los conductores.