Los ministros de Exteriores de la OTAN prepararon hoy una nueva estrategia sobre Afganistán, que aprobará en abril la cumbre aliada de Bucarest, y que insiste en mantener el compromiso con ese país y el traspaso gradual de responsabilidades a las autoridades afganas.

Los ministros estudiaron dos documentos, una estrategia general político-militar a medio plazo y un texto dirigido al público de los países aliados, que se aprobarán en la cumbre de líderes de la Alianza que se celebrará del 2 al 4 de abril.

El segundo documento explicará los motivos de la continuación de la implicación de la OTAN en Afganistán, con énfasis en el progresivo incremento del protagonismo de las fuerzas afganas o en la importancia de la labor de reconstrucción que dirige la ONU.

El ministro francés de Exteriores, Bernard Kouchner, explicó que en esta nueva estrategia los aliados mantienen su compromiso a largo plazo, y que el esfuerzo militar "se inscribe en el marco de una política global de ayuda a la reconstrucción bajo el liderazgo de Naciones Unidas".

Además, la OTAN mantiene el objetivo de realizar una transferencia progresiva de responsabilidades a las autoridades afganas, y promueve una estrategia política acordada con el Gobierno de Kabul.

Los ministros de los países aliados recalcaron hoy que harán todo lo posible para incrementar el número de tropas.

ISAF, la fuerza que la Alianza dirige en Afganistán por cuenta de la ONU, dispone ya de unos 43.000 soldados y busca algunos refuerzos de cara a la reanudación de los combates tras la habitual pausa invernal.

El ministro canadiense, Maxime Barnier, reiteró a los demás países aliados la petición de su país para que se envíe un batallón de mil soldados a la zona del sur de Afganistán en la que operan las tropas de Canadá, una de las que registran combates más duros contra los restos de los talibanes y Al Qaeda.

Kouchner reiteró en este sentido la intención del Gobierno francés de enviar más soldados al este de Afganistán, que según París sería un contingente de fuerzas especiales.

España reafirmó en la reunión que aumentará su compromiso con la OTAN para estabilizar Afganistán en la formación del ejército y los cuerpos de seguridad del país asiático.

Sin embargo, España descarta el envío de más tropas, según ha declarado el secretario de Estado para Asuntos Exteriores, Bernardino León.

"España ha pagado un precio muy alto por su implicación en Afganistán, y el resto de los aliados lo saben bien", ha afirmado León en declaraciones a la prensa.