Público
Público

El Parlamento se dispone a investigar los gastos de Sarkozy

El presidente de la Asamblea francesa permite la creación de una comisión

ANDRÉS PÉREZ

El presidente de la Cámara Baja francesa, el conservador Bernard Accoyer, se negó ayer a hacer lo que le pedía el Gobierno de Nicolas Sarkozy. Contra la opinión de varios ministros, aceptó dejar vía libre a la creación de una comisión parlamentaria de investigación sobre los gastos del presidente francés en sondeos de opinión. Unos gastos que han sido calificados de 'exorbitantes' por el Tribunal de Cuentas.

Los hombres de Sarkozy habían estado batallando duro en los últimos días para convencer a los parlamentarios y a la opinión pública de que la solicitud de los parlamentarios socialistas de crear una comisión de investigación no tenía ningún interés. Las presiones fueron importantes sobre el presidente de la Asamblea Nacional, un hombre que, dado el peculiar reglamento parlamentario francés, era el único que tenía una llave sólida para cerrar el paso a la creación de la comisión sin que se viera mucho la mano del Elíseo.

El Elíseo ha gastado más de tres millones en sondeos de opinión

Pero Accoyer anunció a media mañana que daba luz verde a la tramitación normal de la demanda de la izquierda de una comisión de investigación que, una vez lanzada, permitiría penetrar en el sacrosanto secreto eliseano, consultar documentos, hurgar en discos duros e interrogar a colaboradores del presidente bajo juramento.

Todo ello para intentar saber cosas que han intrigado al Tribunal de Cuentas. Saber, por ejemplo, por qué el Elíseo, entre los 3,28 millones de euros gastados desde 2008 en sondeos algunos de ellos sin relación alguna con la presidencia de un país, pagó 1,47 millones a un solo consejero, Patric Buisson.

Sarkozy no tiene la mayoría suficiente para evitar la pesquisa

Ahora, para impedir la creación de la comisión, al equipo Sarkozy sólo le queda una herramienta: intentar bloquearla en la comisión de leyes, donde deberá dar su próximo paso. Según fuentes parlamentarias, no es tradición en esa comisión oponerse a la instauración de una misión de investigación, tanto más cuanto que el presidente de la Asamblea Nacional subrayó que la pesquisa es pertinente puesto que no existe ningún recurso ante la Justicia.

El escenario que parecían temer los hombres de Sarkozy en los últimos días es exactamente la situación que se está produciendo ahora. Bloquear ahora en la comisión de leyes presionando a los parlamentarios afines sería demasiado visible. Una vez llegada la propuesta al pleno de la Asamblea Nacional, el Elíseo no tiene ninguna oportunidad de ganar.

En el pleno, para vetar la investigación hace falta el voto en contra de tres quintos de la Cámara. Aun consiguiendo el voto negativo de toda la derecha y del centro cosa imposible en la situación actual, Sarkozy no llegaría a ese mínimo de 345 diputados.

La principal impulsora de la exigencia de una investigación, la diputada socialista Delphine Batho, se guardó ayer de todo triunfalismo. 'Espero que no vaya a haber trapicheos', dijo.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias