Entre los pasajeros del Boeing-737 había 21 extranjeros

Un total de 21 extranjeros viajaban en el avión Boeing-737 de la aerolínea Aeroflot que se estrelló esta madrugada en Perm, cerca de los Urales, accidente en el que murieron sus 88 ocupantes.

"Entre los muertos hay ciudadanos extranjeros: nueve azerbaiyanos, cinco ucranianos, un francés, un sueco, un estadounidense, un letón, un alemán, un turco y un italiano", informó Aeroflot en un comunicado.

Según los últimos datos, a bordo del avión se encontraban 82 pasajeros, incluido siete niños, y seis tripulantes, no cinco como se dijo en un primer momento.

En torno a las 07.00 hora local se encontraron las dos cajas negras del avión siniestrado, cuyo accidente pudo haber sido causado por un incendio en una de las dos turbinas del avión, que realizaba el vuelo regular 821 entre Moscú y Perm.

"Ahora se discute el destino de esas cajas negras", informó Irina Neznamova, funcionaria de la Fiscalía de Perm, citada por la agencia Interfax.

Las cajas serán probablemente envidadas para su análisis a Moscú, que se encuentra unos 1.700 kilómetros al Este de Perm, según las agencias rusas.

El Boeing-737-500 ya había iniciado la maniobra de aterrizaje cuando se estrelló en Perm, ciudad de cerca de un millón de habitantes.

El avión cayó sobre la línea férrea del Transiberiano, lo que obligó a suspender el tráfico en el tramo entre Yekaterimburgo y Perm.

El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, nada más ser informado de la catástrofe aérea, ordenó la creación de una comisión gubernamental encabezada por el ministro de Transporte, Igor Levitin.

El accidente en Perm es la mayor catástrofe aérea rusa desde agosto del 2006, cuando un avión Tu-154 de la compañía aérea Púlkovo, que realizaba un vuelo entre las ciudades rusa de Anapa (mar Negro) y San Petersburgo, se estrelló junto a la ciudad ucraniana de Donetsk al intentar sortear una tormenta.