Este artículo se publicó hace 15 años.
Peso y percepción afectarían conducta sexual de las adolescentes
El peso de una adolescente, ola percepción de su peso, afectaría su probabilidad de tenerconductas sexuales riesgosas.
Un estudio sobre casi 7.200 estudiantes secundariasestadounidenses halló que las adolescentes sexualmente activascon bajo peso eran menos propensas que sus pares con pesonormal a usar preservativos.
Lo mismo sucedió con las estudiantes que se considerabancon sobrepeso -lo tuvieran o no-, al compararlas con las que sepercibían con peso normal.
Los resultados, publicados en la revista Pediatrics, "sesuman a cada vez más evidencias de que las adolescentes conpeso bajo o alto correrían más riesgo de tener conductassexuales de riesgo".
Se desconocen las causas exactas. El nuevo estudio hallóque la pregunta se complica cuando se tiene en cuenta la etnia:el peso y la percepción del peso influyen de distinta manera enlas conductas sexuales de las adolescentes blancas, negras ylatinas.
El equipo de la doctora Aletha Yvette Akers, de laUniversity of Pittsburgh, en Pensilvania, usó datos de unaencuesta nacional de salud con 7.193 estudiantes secundarias.
A todas las participantes se les preguntó sobre la conductasexual y el peso y la altura reales, y si percibían que teníansobrepeso, que eran demasiado delgadas o "si estaban bien".
La mitad respondió que había tenido relaciones sexuales yque su peso real no había influido.
Pero las percepciones sí influyeron.
Las participantes que consideraban que tenían sobrepesoeran un 20 por ciento menos propensas a decir que eransexualmente activas. Al mismo tiempo, si ellas teníanrelaciones, eran más propensas que el resto a haberlas tenidoantes de los 13 años.
En toda la cohorte, el único momento en el que el peso realestuvo asociado con la conducta sexual fue en el caso de lasadolescentes con bajo peso, que eran un 60 por ciento menospropensas que aquellas con peso normal a haber usado unpreservativo en la última relación.
Pero una mirada más detallada reveló que la etnia sesgabamuchas de esas tendencias.
Por ejemplo: las latinas con sobrepeso o bajo peso realescorrían más riesgo de haber tenido la primera relación antes delos 13 años o por lo menos cuatro parejas sexuales,respectivamente. Eso no se observó en las adolescentes negras oblancas.
Las jóvenes negras que tenían bajo peso eran menosproclives que las adolescentes con peso normal a usarpreservativo. En tanto, las que se percibían con sobrepesotenían riesgo de haber tenido cuatro o más parejas sexualeshasta ese momento.
Entre las blancas, el peso real no pareció influir sobre laconducta sexual. Pero las adolescentes que se percibían consobrepeso o bajo peso, fuera o no así, tuvieron másprobabilidad de adoptar ciertas conductas sexuales de riesgo.
El peso o su percepción podrían afectar la conducta sexualpor varios motivos, opinó el equipo. Estudios sobre mujeresadultas habían hallado que aquellas con una mala autoimagencorporal son menos propensas a insistir en el uso delpreservativo.
"Creemos que las adolescentes con una autoimagen corporalnegativa tendrían una capacidad o voluntad limitadas denegociación con sus parejas, lo que aumentaría la tasa deconductas sexuales de riesgo", escribió el equipo.
Cualquiera sea la causa, los resultados sugieren que laforma en la que las adolescentes perciben su peso corporal,como así también las "diferencias culturales" en esaspercepciones, serían tan importantes como el peso real en lasconductas sexuales, concluyeron los autores.
FUENTE: Pediatrics, noviembre del 2009
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.