Público
Público

El piloto automático no supo reaccionar

En el blog de un veterano piloto se ofrece una hipótesis seria del accidente

PEDRO GUIL (piloto de Aviación Civil)

Tengo una teoría no maligna sobre la posible causa del accidente del Airbus de Air France, basada en mi propia experiencia. El fenómeno meteorológico que me ocurrió a mí en la zona donde se estrelló ese avión fue un 9 de mayo de 2001, cuando regresaba de Buenos Aires con un B-747-300, de Air Atlanta pero que lo volábamos las tripulaciones de Iberia en esa época.

Desde el sobrevuelo de Río de Janeiro, seguimos exactamente la misma ruta que este avión, y al pasar por la zona aproximada del accidente y cruzando el frente intertropical, con una turbulencia entre moderada y fuerte, en cuestión de 1 a 2 minutos de vuelo, experimentamos una súbita subida de temperatura exterior desde -48ºC a -19ºC. Como consecuencia de esta subida de temperatura, pasamos de volar con un margen de 10.000 kilos a quedarnos con unos 15.000, fuera de normas a ese nivel de vuelo, entrando de inmediato el avión en un inicio de pérdida, con fuertes trepidaciones. Desconecté el piloto automático (P/A) y nos fuimos para abajo, perdiendo 4.000 pies. Estábamos en el llamado coffin corner o rincón del ataúd, es decir que el avión nos daba 'pérdida' por alta velocidad y por baja velocidad. De no haber desconectado el P/A e irnos para abajo, posiblemente hoy estaríamos en el fondo del océano haciéndole compañía a los de Air France, ya que el P/A habría intentado mantener altura a base de potencia en los motores. y eso era imposible. Por tanto, posiblemente habríamos entrado en una posición anormal muy difícil de recuperar por ser de noche y tener una gran desorientación espacial al estar en nubes.

He estado volando hasta final de febrero de 2009 el A340 y haciendo entre otras esa misma ruta, Río a Madrid, y no se me ha vuelto a dar esa excepcional circunstancia meteorológica. Es decir, que en 40 años trabajando como piloto de líneas aéreas, sólo me ha ocurrido una vez. Es como un enorme embudo de unas 40 millas náuticas de diámetro de aire enormemente cálido y que como consecuencia de un cúmulo-nimbo en periodo de formación, ascendía hasta grandes alturas, afectándonos de lleno.

Según el criterio de Airbus, volando en turbulencia fuerte o severa, NO se debe desconectar el piloto automático, pero lo que no está previsto es que te ocurra este fenómeno... y si desde luego no han desconectado el P/A por no percatarse de ello, en mi opinión han entrado en posición anormal y el avión se ha roto. Esta teoría la avala el orden de los mensajes automáticos ACARS, que indicaron lo siguiente: cuando el P/A ya no puede aguantar más, se desconecta, pero el avión ya está descontrolado; pasa a alternativa en los mandos de vuelo; fallo de los inerciales e ISIS, que es un horizonte artificial de emergencia; fallo de los ordenadores de vuelo; aviso de aumento de presión de cabina (en este momento en mi opinión es cuando revienta el avión) y finalmente múltiples fallos eléctricos porque el avión se está desintegrando.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias