Este artículo se publicó hace 14 años.
La plantillla huye del hospital oficial blanco
Secretismo en el Madrid en torno a la hernia discal de Higuaín
Higuaín tampoco se fía. Como otros de sus compañeros, escucha a los médicos que trabajan para el Madrid (el club llegó hace tres temporadas a un acuerdo económico con Sanitas para externalizar el departamento), pero no acepta del todo sus diagnósticos. Los jugadores blancos acaban huyendo fuera, generalmente a sus países de origen, para tratarse. Al menos en las lesiones más graves. El caso de Higuaín, posiblemente el que más ha escocido dentro de la enfermería blanca, confirma esta tendencia.
El futbolista se sometió a las exploraciones médicas que le recomendó el Madrid, pero desconfió de su diagnóstico: una hernia discal que aconseja intervención. Higuaín acudió el jueves a Barcelona a escuchar una segunda opinión médica (doctor Enric Cáceres) y su padre anunció que el jugador no tomará una decisión definitiva hasta consultar en Buenos Aires con "médicos de confianza".
Desde el Bernabéu prohíben hablar a Sanitas del caso del argentino
El nuevo centro de operaciones médicas del Madrid es el hospital de Sanitas-La Moraleja. Allí se examinó el miércoles Higuaín su hernia discal en la región lumbosacra. El neurocirujano, doctor José Manuel Cañizal, prescribió el paso por el quirófano. El argentino arrastra la dolencia desde hace seis semanas. La lesión le hizo perderse los partidos ante el Ajax y el Barça. Pero se resiste a operarse. Las hernias discales generan dolor, pero sólo se operan si aparece además una pérdida de fuerza o de sensibilidad, como sucede en el caso del goleador.
El Madrid trata de llevar con aparente naturalidad la desconfianza que muestran sus jugadores con respecto a los servicios médicos. De hecho, la norma impuesta por el club es que sea el futbolista el que libremente elija quién le trate. Pero la falta de transparencia con la que está actuando en este caso no emite señales de que se digiera con normalidad. El Madrid negó a este diario la versión del doctor Carlos Díez, actual jefe de los servicios médicos blancos, ni autorizó a Sanitas a pronunciarse sobre Higuaín y la reiterada huida de los jugadores de sus servicios. Un portavoz de la clínica explicó que el protocolo les impide hablar sin autorización del Madrid. Desde el Bernabéu no quisieron tampoco concretar quién corre con los gastos de estas decisiones, si el jugador que se niega a ponerse en manos de los médicos oficiales o la entidad.
Higuaín no es el primer jugador que escapa de la senda marcada por el Madrid o deja a los médicos madridistas en mal lugar. Van Nistelrooy puso de moda la consulta en el extranjero. Su rodilla perteneció siempre al cirujano estadounidense Steadman y su tobillolastimado fue tratado por el doctor Van Dijck, de Ámsterdam. Los traumatólogos de Madrid no contaban para Ruud.
El padre del jugador quiere que lo examinen «médicos de confianza»
Cuando Pepe se rompió el ligamento cruzado de su rodilla, hace un año, escogió a un traumatólogo de Oporto, el doctor Noronha, para ser intervenido. Lo mismo sucedió con la polémica rodilla de Kaká, cuyo menisco operó en agosto un cirujano de Amberes, el doctor Marc Martens. La rehabilitación la ha llevado a cabo en Brasil.
Cristiano se suma a la lista de pacientes que necesitan médicos extranjeros: de su tobillo se encargó el pasado año el doctor Van Dijk. Hasta Robben acudió a un curandero holandés para tratarse de sus roturas musculares.
La única excepción a esta cadena de médicos extranjeros fue la rodilla de Diarra, operada en el hospital de Sanitas-La Moraleja. Pero incluso en este caso, la operación no se produjo hasta que el centrocampista viajó a Lyon y recibió el visto bueno del médico del Olympique.
A Pepe le intervino de su lesión de cruzado el portugués Noronha
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.