Polémica por un vídeo en el juicio a los Jemeres Rojos

Los abogados del juicio al torturador jefe de Pol Pot discutieron el miércoles sobre si era o no admisible utilizar las imágenes de su centro de torturas rodadas en 1979 por soldados vietnamitas, cuando expulsaron a los Jemeres Rojos del poder de Camboya.

Los abogados de Duch, que dirigía el centro de interrogatorio S-21 de Phonm Penh donde fueron asesinados al menos 14.000 "enemigos de la revolución", dijeron estar muy sorprendidos por la petición de última hora de la acusación para utilizar la película como prueba contra su cliente.

"Nos oponemos absolutamente a la introducción del vídeo", dijo el abogado camboyano de Duch, Kar Savuth, al tribunal formado para procesar a los responsables de la muerte de 1,7 millones de personas entre 1975 y 1979, durante la era de los Jemeres Rojos.

El tribunal formado por Camboya y Naciones Unidas levantó la sesión el miércoles tras dos días de audiencias preliminares antes del inicio del juicio en marzo.

La película es un vídeo de siete minutos en blanco y negro rodado por el cuerpo de grabación del Ejército vietnamita días después de que sus tropas expulsaran a los hombres armados de Pol Pot de Phnom Penh, y muestra los escuálidos cadáveres de los internos del centro, algunos de ellos aún encadenados.

En una rueda de prensa celebrada el lunes en la víspera del juicio, dos miembros del grupo vietnamita que grabó las imágenes dijeron que también habían encontrado a cinco niños supervivientes del S-21, escondidos bajo pilas de ropa de los prisioneros. Uno de los niños murió de desnutrición poco después, añadieron.

Kar Savuth preguntó cómo podrían haber escapado los niños de la orden de Duch de matar a todo el mundo en el S-21 mientras los vietnamitas marchaban sobre la capital.

La defensa dijo que la película y los posibles nuevos testigos deberían haber sido investigados por los jueces, que llevan un año preparando los cargos contra Duch y otros cuatro altos cargos del régimen de Pol Pot, y se ha opuesto a la presentación de más de 50 nuevos documentos, incluyendo informes de interrogatorios con supuestas notas manuscritas de Duch ordenando la muerte de los prisioneros.

"Este vídeo está motivado políticamente para disfrazar la verdad", dijo Kar Savuth, añadiendo que los cámaras vietnamitas deberían ser llamados a testificar en el juicio.

Eso podría encender los ánimos en Camboya, donde la expulsión vietnamita de Pol Pot está considerada por algunos como el inicio de una década de ocupación de odiados vecinos.

El abogado Robert Petit, miembro extranjero de la acusación, dio una airada respuesta a las acusaciones de la defensa, diciendo que el vídeo y los demás documentos son pruebas vitales contra Duch, que está acusado de crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad, tortura y homicidio.

"La sustancia de este juicio, su sin duda máximo propósito, es hacer justicia a esas más de 14.000 víctimas del S-21", dijo, añadiendo que la admisión de culpabilidad hecha por Duch antes del juicio no era suficiente.