Cuando un político no cumple...

La ciudadanía paga las consecuencias. La segunda jornada de huelga de los funcionarios de Justicia de la Comunidad de Madrid volvió a paralizar los tribunales de la capital. Cientos de madrileños vieron aplazados sus juicios y otros tantos se marcharon de los juzgados sin poder casarse o tramitar un simple certificado de nacimiento.

En la sede central de los juzgados de la Plaza de Castilla, la situación era muy diferente de la habitual. "Estos pasillos siempre suelen estar a rebosar de gente y hoy están vacíos". Vanesa, vigilante de seguridad, estaba asombrada de la inusual tranquilidad de las dependencias judiciales más importantes de Madrid.

Una joven, que había asistido al juicio en el que debía testificar y que fue suspendido, salía aliviada porque se atrasaba así "el trance" que le suponía hablar ante un tribunal.

Pero la mayoría de los afectados por las más de 2.000 actuaciones judiciales que tuvieron que ser suspendidas por la huelga no estaban tan contentos. En este contexto, resultó de nuevo más verosímil el porcentaje de seguimiento cuantificado por los sindicatos (81%) que el proporcionado por la Comunidad (39%).

En las múltiples concentraciones que celebraron, los funcionarios reiteraron sus disculpas a la ciudadanía y culparon al Gobierno de Aguirre de la situación.

Y es que el paro se produce después de que el Ejecutivo regional "haya ignorado" un acuerdo adoptado en 2007 que contemplaba el incremento de las plantillas y mejoras salariales.

La Consejería de Justicia, en manos de Francisco Granados, convocó ayer a los sindicatos a una primera reunión para intentar desbloquear la situación. Lo cierto es que "ni se vislumbraba" un acuerdo, según CCOO.