Portugal aplastó 7-0 a Corea del Norte el lunes, consiguiendo el resultado más abultado de la selección lusa en un Mundial y restaurando el orgullo herido de las viejas potencias europeas, mientras que la selección chilena continuó con su buena racha en el torneo al imponerse por 1-0 al rocoso equipo suizo.

La poco conocida selección de Corea del Norte regresa a una Copa del Mundo por primera vez desde que asombró al mundo en Inglaterra hace 44 años.

Pero no existió ninguna posibilidad de que se repitiese la hazaña de 1966, en la que una selección portuguesa comandada por Eusebio tuvo que remontar un 3-0 ante los norcoreanos para terminar imponiéndose por 5-3 en los cuartos de final del torneo, en uno de los mejores partidos de todos los tiempos.

La nueva generación portuguesa hizo su trabajo más cómodamente. Bajo la mirada de Eusebio en Ciudad del Cabo, se impuso a la elogiada defensa norcoreana cada vez con mayor facilidad.

El hombre del partido, Cristiano Ronaldo, anotó el sexto gol, el primero con su selección en competición oficial en dos años, en un partido que deja a Corea del Norte con cero puntos tras dos jornadas y sin ninguna posibilidad de clasificarse a octavos de final.

El seleccionador de Portugal, Carlos Queiroz, se mostró orgulloso de su equipo por "la maravillosa manera de jugar, la gran actitud, el respeto por el partido, el gran juego mostrado y los bonitos goles".

Por otro lado, a pesar de la expulsión de Valon Behrami, Suiza consiguió romper el récord que ostentaba Italia de 550 minutos sin conceder un gol en un Mundial, en el partido del lunes ante Chile.

Pero su muralla defensiva fue superada en la segunda mitad durante una oleada de ataques chilenos. Un cabezazo de Mark González, que salió desde el banquillo, a falta de 15 minutos para el final, dio la victoria por 1-0 a Chile, que lidera el Grupo H con seis puntos.

El presidente chileno, Sebastián Piñera, un apasionado aficionado del fútbol, vio el partido en Constitución con los supervivientes del terremoto del 27 de febrero. "El Mundial es para todos y lo queríamos compartir", dijo desde la zona devastada.