El primado católico disuadió a Blair de anunciar su conversión en una visita al Vaticano

El cardenal Cormac Murphy-O'Connor disuadió al ex primer ministro británico Tony Blair de utilizar una visita al Papa Benedicto XVI para anunciar oficialmente su conversión al catolicismo, informa hoy el dominical "Ths Sunday Telegraph".

Según el periódico, el líder laborista veía en su visita al Vaticano, poco antes de terminar su mandato, el pasado junio, una oportunidad perfecta para hacer ese anuncio histórico.

Sin embargo, Murphy-O'Connor, arzobispo de Westminster y primado católico de Inglaterra y Gales, le explicó que sería poco sensato e inapropiado aprovechar una ocasión de tanta visibilidad internacional para anunciar algo tan privado.

El cardenal le recomendó que esperara a dejar su despacho oficial del número 10 de Downing Street.

Blair ha recibido supuestamente instrucciones en la religión católica de un capellán castrense llamado John Walsh y del secretario del propio cardenal, Mark O'Toole.

Según "The Sunday Telegraph", si Blair no ha anunciado aún su conversión al catolicismo, contrariamente a lo que esperaban algunos, es por su temor a que ponga en peligro su labor actual de enviado del Cuarteto para Oriente Medio.

Ahora se considera como lo más probable que no anuncia públicamente su conversión hasta el próximo año, probablemente durante la Semana Santa.

El deseo de Blair de convertirse a la fe católica ha sido un secreto a voces durante años.

Si no ocurrió durante sus diez años de gobierno fue porque habría resultado polémico ya que, en interpretación de algunos expertos, la Ley de Emancipación (religiosa) de 1829, que dio plenos derechos civiles a los católicos, impide a un católico ser primer ministro.

Algunas cláusulas de esa ley establecen la imposibilidad de que el monarca y jefe de la Iglesia de Inglaterra tenga como asesor a un católico que ocupe un puesto civil o militar.

También habría creado un conflicto desde el punto de vista de la Iglesia anglicana ya que el primer ministro es quien elige a los obispos de esa confesión.

El anterior arzobispo de Westminster, el cardenal Basil Hume, se vio obligado a reconvenir a Blair por insistir en comulgar junto a su esposa, la católica Cherie Blair, pese a no haberse convertido aún.

Se cree que será el propio Murphy-O'Connor quien dé oficialmente la bienvenida a Blair en el seno de la Iglesia católica durante un servicio en el que el político tendrá que recitar el llamado credo de Nicena.