El PSOE ha logrado hoy sacar adelante todas sus resoluciones derivadas del debate sobre el estado de la nación, incluida una pactada con el PP y CiU sobre hipotecas para tratar de evitar los embargos, al tiempo que ha reforzado sus lazos con CC y con el PNV, al que ha garantizado casi todas sus mociones.

Es la primera vez que los socialistas ven ratificadas todas sus propuestas en un debate de política general desde que gobierna José Luis Zapatero, quien ha señalado que este resultado es "la expresión más clara" de que el Gobierno cuenta con el respaldo parlamentario "suficiente" para continuar con sus políticas.

Mientras los votos de los socialistas han sido decisivos en la aprobación de las 51 resoluciones aprobadas por el pleno de la Cámara, el grupo popular no ha conseguido apoyos suficientes para que las suyas recibieran luz verde si no era con el PSOE.

Así ha ocurrido con su propuesta para "extremar la vigilancia" sobre los concejales de Bildu, rechazada por la Cámara pese a que el PP había acordado una transacción con UPN y UPyD, que también tenían iniciativas similares, y una vez que había descartado consensuar el nuevo texto ofrecido ayer por los socialistas.

Han sido tres las resoluciones del PP que han prosperado, ninguna de carácter económico, relativas a política exterior, transparencia y buen gobierno y respeto al Parlamento por parte del Ejecutivo.

Las hipotecas se han llevado buena parte de los esfuerzos negociadores de los grupos parlamentarios, que han discutido casi hasta el último minuto sobre propuestas y contrapropuestas.

Finalmente, la dación en pago -saldar una deuda hipotecaria solo con la entrega de la vivienda- propuesta por varios partidos como BNG, CiU, o ERC-IU-ICV no ha logrado luz verde, pero a cambio el PSOE ha aceptado incentivar a los bancos para que ofrezcan esta fórmula a la firma de nuevas hipotecas.

Y casi por unanimidad, la Cámara se ha puesto de acuerdo para respaldar el aumento de la cantidad de sueldo no embargable por impago hipotecario, algo que prometió Zapatero en el primer día del debate.

También ha habido apoyo casi unánime para la propuesta del PSOE que abogaba por respetar las decisiones del Tribunal Constitucional y a sus magistrados.

El "número dos" del grupo socialista, Eduardo Madina, ha hecho una lectura de las votaciones muy favorable al Gobierno, que a su juicio ha reforzado los apoyos con CC y PNV que le permitirán seguir adelante con las reformas económicas en marcha.

Sin embargo, la portavoz del grupo popular, Soraya Sáenz de Santamaría, se ha mostrado convencida de que no habrá pacto estable del PSOE con nacionalistas vascos y canarios.

En cualquier caso, Coalición Canaria ha visto respaldadas las cuatro propuestas que había presentado y el PNV, trece de quince, muchas de interés para el País Vasco y relativas a traspasos de competencias que se están negociando, como los ferrocarriles de cercanías.

Pero también ha consensuado el PSOE con CiU un amplio paquete de mociones -ocho de las quince presentadas- la más relevante referida al traspaso "urgente" a Cataluña de las competencias en materia de becas en cumplimiento de una sentencia de hace 10 años del Tribunal Constitucional.

Aunque la propuesta de CiU para que el Tesoro avalase la emisión de deuda pública de las autonomías no ha sido aceptada, sí ha contado con el PSOE para otras sobre infraestructuras, que incluye acelerar la construcción del corredor mediterráneo o estudiar una mayor participación de comunidades y ayuntamientos en los aeropuertos de Madrid y Barcelona.

Con el bloque de la izquierda minoritaria, el grupo socialista ha consensuado siete iniciativas, de las cuales el BNG se ha llevado tres, entre ellas una para estudiar el papel de las Diputaciones Provinciales.

Otra moción de ERC-IU-ICV, sobre el pacto del euro, aboga por una tasa para transacciones financieras internacionales y por emitir eurobonos para frenar la especulación, y también han recibido luz verde una de ERC en solitario y dos de IU-ICV.

UPyD es la única fuerza que no ha conseguido aprobar resolución alguna.