Rajoy asegura que él ofrece propuestas, frente a la "máquina de denigrar al adversario" del PSOE

El candidato del PP a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy que el programa electoral de su partido se caracteriza por ocuparse con propuestas de las "necesidades" de los españoles, mientras que el PSOE no presenta iniciativas y solo es "una máquina de denigrar al adversario".

En su intervención en un acto de seguridad ciudadana organizado por el PP de Andalucía, Rajoy ha acusado al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de ser "el peor desde 1997", y ha señalado que, al contrario que el PSOE, el PP no habla ni de naciones, ni de Memoria Histórica, sino de "las cosas que importan a la gente".

Mariano Rajoy ha denunciado los "cambios de posición" de José Luis Rodríguez Zapatero "según los días o según dónde se encuentre" respecto a las diversas cuestiones, lo que, en su opinión, pone de manifiesto que los socialistas "no tienen un proyecto claro".

"Y lo peor de todo es que nos dicen que nos callemos, pero yo no me callo y voy a hablar de lo que de verdad le importa a los españoles", ha exclamado el líder del PP, quien ha reiterado que va a seguir abordando los asuntos que, según él, "importan" a los ciudadanos como es el caso de la economía o la inmigración.

Tras decir que Rodríguez Zapatero "tiene alergia" a la economía, el candidato popular ha insistido en que el Gobierno socialista "ha vivido de la herencia" legada por el PP, una situación que, en su opinión, se está apreciando en la subida de los precios y en el aumento del paro en los últimos meses.

Ha puesto el acento en los 4.400 españoles parados diarios que han puesto de manifiesto el INEM, aunque se ha mostrado seguro de que "al igual que hicimos en 1996 lo volveremos a arreglar ahora" tras las elecciones del 9 de marzo, porque con las políticas que está poniendo en marcha el PSOE "vamos inevitablemente al desastre".

"Con este señor, los españoles tienen un serio riesgo en sus economías familiares", ha advertido Mariano Rajoy, quien ha criticado medidas como las de los 400 euros, a la que calificó de "ocurrencia" y de la que esperó que "sea la última".

En materia de inmigración, el candidato popular ha defendido su propuesta de contrato de integración, ha criticado la política del "avestruz" del Gobierno de Zapatero y ha recordado que en la actualidad las tarjetas de residencia han aumentado un 123 por ciento respecto a 2004, y que en España han entrado más extranjeros que en cuatro países juntos de la UE.