Este artículo se publicó hace 15 años.
Rajoy exige retirar "ya" las cuentas de 2010 aunque se prorroguen actuales
El líder del PP, Mariano Rajoy, exigió hoy que se retire "ya" el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para 2010, aunque tengan que prorrogarse las cuentas de este año, porque "lejos de ser un instrumento contra la crisis la van a agravar" y van a "generar más desconfianza e incertidumbre".
En su intervención en la jornada presupuestaria que se celebra en la sede central de su partido, Rajoy advirtió de que con la política económica del Gobierno socialista "no saldremos de la recesión en muchos años", porque el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, "no quiere hacerle caso a nadie".
Zapatero, apuntó Rajoy, "debe creerse el Mesías", porque desoye las recomendaciones de organismos internacionales como el FMI o la OCDE, así como las políticas diferentes que se hacen en otros países y las recomendaciones de que cambie de política que vienen de "muchos dirigentes y muchos militantes de su partido".
El presidente del PP insistió en que se debe hacer "una política económica mejor", y ante quienes dicen que los populares no tienen una política económica alternativa instó a "que se lean" el programa electoral y las iniciativas de reforma fiscal, política energética o de educación que han llevado a las Cortes.
Rajoy reiteró la necesidad de acometer reformas estructurales, porque el PSOE no ha impulsado ninguna y ha vivido, reiteró, "de la inercia y de la herencia".
Los dos instrumentos con los que se cuenta para afrontar la crisis son las citadas reformas estructurales y la política presupuestaria fiscal. Las primeras no se impulsan y en cuanto a las cuentas, insistió, habría que retirarlas ya.
El líder del PP justificó su rechazo a estos Presupuestos -que contarán con una enmienda a la totalidad de este partido- porque, entre otras razones, se basan en unas previsiones económicas que son "lisa y llanamente mentira".
Recordó en este sentido cómo se han incumplido todas las previsiones expuestas en los Presupuestos de este año, y añadió que "un gobierno incapaz del diagnóstico es incapaz de tomar medidas".
También criticó que se vaya a gastar el 50% más de lo que se ingresa y advirtió de que el endeudamiento público está haciendo que el Estado "absorba todo el dinero que hay en el mercado" y restrinja así el crédito al sector privado -familias y empresas-.
El líder del PP también censuró la caída de la inversión "en un 10%". Todas las políticas productivas, advirtió, "quedan liquidadas", mientras la partida por desempleo sube el 58% y los gastos por los intereses de la deuda pública aumentan el 33%.
En su intervención, Rajoy volvió a criticar la subida de impuestos, la "puntilla" a unas cuentas absurdas que supondrá, advirtió, menos inversión y menos consumo.
Antes de Rajoy intervinieron en el acto abierto a los medios de esta jornada la responsable de organización, Ana Mato, y el portavoz de Economía del partido, Cristóbal Montoro.
Mato aseguró que en el Gobierno socialista "ni hay ministros, ni vicepresidente económico ni nada" y con Elena Salgado persisten "los mismos problemas" que con su antecesor en la cartera de Economía y Hacienda, Pedro Solbes. "El problema no es ni Salgado ni Solbes, es Zapatero", añadió.
Por su parte, Montoro acusó al Gobierno socialista de no hacer una política económica "en el sentido normal de la palabra" y añadió que en el PP está "realmente comprometido con una alternativa al desastre político de Zapatero".
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