El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha exigido hoy a los Gobiernos central y aragonés a que "se involucren muy a fondo" en la búsqueda de una solución a la tesitura que vive la planta de Opel en Figueruelas.

Rajoy, en un acto de campaña electoral europea celebrado en Zaragoza, ha comenzado su intervención con esta petición a las administraciones central y autonómica, una vez logrado el acuerdo que salva a Opel en Europa y que habrá de afectar a la factoría aragonesa, en la que trabajan 7.500 personas.

La implicación "a fondo" es una "obligación" para el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y para el de Marcelino Iglesias.

El líder del PP ha añadido que el asunto hay que tomarlo "en serio", pues requiere "negociar bien" y "ser diligentes" con el fin de "evitar problemas" en el futuro.

Asimismo, ha comprometido el apoyo de su partido a todo aquel Gobierno que dé "la batalla" por solucionar los problemas económicos de Opel en España, un sector "fundamental" no sólo para la comunidad autónoma, sino también para España.

Si las soluciones no son idóneas, el PP, ha puntualizado Rajoy, "pedirá responsabilidades".

La salvaguarda de la economía española, su defensa en las instituciones europeas, son deberes del Gobierno, tal y como ha explicado el presidente de los populares, y por ello, ha reivindicado la importancia de la agricultura y la ganadería españolas.

Es "un sector con futuro", ha añadido antes de enumerar las industrias del vino, del aceite, del cereal, de las frutas y de las hortalizas.

Por ello, el PP defenderá la buena salud de estos sectores en la Unión Europea y luchará por recuperar los fondos estructurales que España ha perdido por la mala negociación del Gobierno de Zapatero.

Las conexiones pirenaicas, la situación de Teruel, cuyo enlace con Cuenca y Madrid completará el PP si gobierna, ha dicho Rajoy, son otros de los asuntos territoriales que hoy ha abordado el líder de los populares.

"Tendremos que poner en marcha lo que otros no son capaces de hacer", ha concluido.