El rey de España animó hoy a Egipto a estrechar su cooperación económica con las empresas españolas y a impulsar proyectos en común en terceros mercados, como África, Oriente Medio e Iberoamérica.

Don Juan Carlos inauguró hoy el foro empresarial hispano-egipcio en el marco de su visita de Estado a Egipto y al que asistieron ministros de ambos Gobiernos y más de 150 compañías de los dos países, con el fin de concretar proyectos en ámbitos como el turismo, la energía o las infraestructuras.

El Rey afirmó que España y Egipto están llamados a reforzar su colaboración como "piedras angulares" en la vertebración de la región del Mediterráneo como "modelo de entendimiento, paz, integración y progreso".

El mensaje expresado por Don Juan Carlos se justifica en el deseo de España de abrir nuevos mercados en la ribera sur del Mediterráneo y en países africanos aprovechando la influencia de Egipto, que a su vez necesita una plataforma para adentrarse en Sudamérica.

El Rey manifestó que el trabajo en común en materia económica se ha convertido en una "forma añadida de diálogo" entre ambos países, "imprescindible" para generar crecimiento, empleo y bienestar.

Resaltó el hecho de que Egipto haya apostado de manera "decidida por integrarse plenamente en la economía mundial", abriendo sus mercados y acometiendo una profunda reforma estructural.

Don Juan Carlos hizo hincapié en que España es un socio fiable por ser la octava economía del mundo por volumen de Producto Interior Bruto (PIB) y el tercer mayor inversor internacional.

Con este bagaje, añadió el Rey, "España quiere y puede ofrecer su experiencia y cooperación" a Egipto, a lo que añadió el "probado dinamismo y competitividad" de las empresas españolas gracias, entre otros aspectos, a su nivel tecnológico.

En el foro, participaron por parte española los ministros de Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos, y el de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, y el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Gerardo Díaz Ferrán.

Por parte egipcia, lo hicieron el ministro de Comercio e Industria, Rasheed Mohamed Rasheed, y el de Finanzas, Yousef Butros Ghali.

Rasheed, considerado uno de los hombres de confianza del presidente egipcio, Hosni Mubarak, habló del comienzo de una etapa "muy fuerte" de cooperación y del "espaldarazo" que representa la visita de los Reyes, que hoy concluirá en Alejandría.

El titular de Industria puso a España como modelo de crecimiento económico y capacidad tecnológica.

También destacó el interés en que empresas españolas ayuden a lograr la meta de que el 20 por ciento de la energía generada en su país en 2020 proceda de fuentes renovables, donde España es uno de los países puntales.

La española Gamesa Eólica es en la actualidad el primer suministrador de energía eólica en Egipto, que sólo representa el uno por ciento.

Butros Ghali también apostó por incrementar el intercambio comercial, para lo que garantizó la reducción de trabas burocráticas para facilitar la inversión española.

Joan Clos valoró las reformas que está haciendo Egipto y ofreció la experiencia de España para tener un papel relevante en las privatizaciones proyectadas por el Gobierno egipcio.

"España quiere y debe formar parte de este proceso de modernización", dijo el ministro de Industria.

Recordó que la mayor inversión de una compañía española en Oriente Medio es la de la eléctrica Unión Fenosa, con su planta de gas licuado situada en la localidad costera de Damietta, cerca del Canal de Suez.

Gerardo Díaz Ferrán abogó por futuras cooperaciones empresariales en terceros países, con fórmulas como empresas mixtas, sobre todo en el mundo árabe.

Para trabajar de forma conjunta, el presidente de la CEOE solicitó a las autoridades egipcias un entorno normativo, jurídico y fiscal "estable y fácilmente aplicable".