El "Rey David" regresa a la final

David Nalbandian no se conformó con ser el verdugo del español Rafael Nadal y luchará una vez más por convertirse en el primer argentino en ganar el Masters de Madrid al doblegar hoy al serbio Novak Djokovic por 6-4 y 7-6 (4) en semifinales.

Ganar al segundo y tercer jugador del mundo en la misma semana no es nada fácil, y esto es lo que ha hecho el jugador de Córdoba, 25 del mundo esta semana, inmerso en un decisivo periodo de renovación y en búsqueda de los mejores momentos de su carrera.

Acompañado ahora por su compatriota Martín Jaite en la dirección técnica, desde que pactaron ese reencuentro dos semanas después de Wimbledon, parece que lo ha conseguido. Una sola reválida le queda más, derrotar en la final bien al suizo Roger Federer o al alemán Nikolas Kiefer, los otros dos semifinalistas.

Nalbandian es un viejo conocido en Madrid. El finalista de Wimbledon en el 2002 es el jugador que más partidos lleva disputados en el Rockódromo de la capital. En total 21 con el de hoy, con un saldo de 17 victorias y cuatro derrotas. Ha sido fijo en las cuatro últimas semifinales como mínimo, y siempre salió de la capital española con un gusto amargo porque aquí ha peleado al máximo, sin demasiada fortuna.

Contra Djokovic, el de Córdoba ha dado un salto de calidad. Vencer a uno de los jugadores más en forma del momento en una hora y 41 minutos y en sólo dos sets lo prueba. Además el serbio venía de ganar en Viena en unas circunstancias muy parecidas a las de Madrid. Bien es verdad que el de Belgrado padeció anoche un intenso dolor en la muela del juicio, y que hoy su cara reflejaba la pesadilla que debió sufrir de madrugada, pero la calidad que Nalbandian atesora fue superior al vendaval de golpes que el finalista del Abierto de Estados Unidos puso en marcha.

Nalbandian está crecido. Derrotar a tres favoritos como el checo Tomas Berdych (9), Rafael Nadal (2) y Djokovic (3) en una semana son sus razones. Y eso que tuvo que salvar una bola de set hoy, al resto, en la segunda manga, con 6-5 para "Nole", con un revés demoledor, para forzar el desempate.

Djokovic empezó el partido con un "ace" para acabar con nueve. Pero cometió cinco dobles faltas, una de ellas decisiva en el desempate del segundo set. Nunca se vio ganador ante un rival al que había doblegado en el único enfrentamiento previo, en el Masters Series de Montreal este año (6-2 y 6-3), donde el de Belgrado realizó una tripleta mágica, imponerse a los tres mejores del mundo consecutivamente: Andy Roddick (cuartos), Nadal (semifinales) y Federer (final).