Alentado por el rendimiento que ha obtenido hasta ahora en la Copa del Rey, Gregorio Manzano mantuvo su apuesta en Getafe, en la ida de los cuartos de final, se fió de las rotaciones y prolongó los minutos de los menos habituales de la plantilla del Mallorca, todo lo contrario que su rival, amarrado a la fidelidad del bloque que mantiene a flote al equipo en todos los torneos.

No le salió bien a Manzano, que apenas contó con los miembros del conjunto que cosecharon un empate en el Ciudad de Valencia, frente al Levante, en el partido más reciente de la Liga. El primero de la segunda vuelta. Sólo cuatro futbolistas quedaron sin descanso: Fernando Navarro, los argentinos Guillermo Pereyra y Jonás Gutiérrez y Fernando Varela. Cuatro jugadores.

Ni siquiera nutrió de minutos al meta Miguel Ángel Moyá, titular indiscutible y uno de los más determinantes en el duelo contra el Real Madrid, en la eliminatoria previa. En esta oportunidad, Manzano situó en la portería al argentino Germán Lux, un hombre con bagaje limitado en el conjunto balear asentado a su condición de suplente.

Sin embargo, es esta la apuesta mallorquina para la Copa del Rey. En el Coliseum Alfonso Pérez, a excepción del meta sudamericano y del atacante Víctor, el resto, nueve futbolistas, fue el que saltó al césped del estadio Santiago Bernabeu hace una semana. Fernando Varela, Sergio Ballesteros, Iván Ramis y Fernando Navarro en la zaga; el griego Angelos Basinas, Pereyra, Borja Valero y Jonás en la medular y Óscar Trejo en la punta.

Mientras Manzano parece haber definido claramente un once copero Michael Laudrup mantiene la fidelidad a un mismo bloque para las tres competiciones en las que está inmerso.

Bien por las reducidas dimensiones de su plantilla o por la falta de posibilidades en el resto de efectivos, el preparador danés fía la suerte del equipo a un grupo de jugadores establecido. El meta argentino Óscar Ustari, más sosegado y una vez aparcadas las opciones de marcha, ha recuperado la confianza del entrenador y cuenta para la Copa. Ocurrió en la eliminatoria frente al Levante y también ante el Mallorca.

Es una de las excepciones Ustari, acompañado en las labores defensivas por dos fijos, los argentinos Daniel Cata Díaz y Lucas Licht. En esta ocasión, Laudrup les acompañó del capitán David Belenguer y del rumano Cosmin Contra, tal vez premiado por el gol del triunfo frente al Sevilla. Pero ambos son carne de banquillo.