Santos dice que el riesgo para rehenes de las FARC rescatados fue "mínimo"

El ministro colombiano de Defensa, Juan Manuel Santos, aseguró que el riesgo que corrieron los 15 rehenes rescatados hoy por tropas del Ejército fue "mínimo" y destacó que el operativo fue producto de la "audacia y tenacidad" de las Fuerzas Militares.

"El riesgo para los secuestrados fue siempre mínimo, eso lo calculamos muy bien, y esa fue una de las razones por las que no quisimos consultar a las familias, porque algunas de ellas podían reaccionar negativamente y hacer público esto y se hubiera frustrado", dijo Santos.

En una alocución por radio y televisión presidida por el jefe de Estado colombiano, Álvaro Uribe, el ministro recordó su relación "de vieja data" con Ingrid Betancourt y la promesa a la mamá de ella, Yolanda Pulecio, de no descansar hasta ver libre a la ex candidata.

Junto al presidente y los mandos militares y policiales se encontraba Ingrid Betancourt y los once agentes y soldados rescatados, quienes estaban acompañados por sus familias.

Los tres estadounidenses fueron trasladados a Estados Unidos.

Santos añadió que tras hablar con los altos mandos militares todos concordaron en que esta es la operación que más "satisfacción" les ha producido "con creces".

"Sin un solo tiro haber podido liberar a nuestros compatriotas y tres estadounidenses", resaltó.

"Al principio, cuando propusieron la operación en teoría los creyeron unos locos (y les dijeron) que eso no era posible. Pues no eran locos, eran unos patriotas, la inteligencia del Ejército, que con su audacia y su tenacidad logró convencernos y hoy estamos celebrando esa tenacidad y audacia", indicó.

Santos señaló que los tres estadounidenses rescatados estaban muy contentos de poder recobrar su libertad y contó como anécdota que le pidió esta mañana a su esposa e hija que oraran porque iba a suceder algo muy importante y ellas acudieron a una iglesia de La Milagrosa en París.

Ellas, al enterarse después de la noticia, le dijeron al ministro que le regalara algo a Betancourt de parte de ellas y él le entregó en el avión que la llevaba a Bogotá una imagen de la virgen de La Milagrosa.