Dentro del maletero de un coche Seat Toledo. Con las manos y los pies atados. Y cubierto con una manta. Un joven magrebí permaneció 60 horas secuestrado en la provincia de Zaragoza por cuatro delincuentes de su misma nacionalidad que le reclamaban una deuda de hachís de 3.270 euros. Los GEO y agentes de la Sección de Secuestros y Extorsiones de la UDEV de la Policía lo liberaron en la noche del 5 al 6 de octubre en una operación dada hoy a conocer por la Policía.

Los secuestradores pedían 3.270 euros a la familia

Los hechos se iniciaron el pasado día tres, cuando la madre de la víctima recibió en la localidad marroquí donde reside una llamada telefónica procedente de España en el que un hombre, que se expresaba en árabe con un fuerte acento de la zona del Rif, le aseguraba que tenía a su hijo secuestrado 'y si no paga 3.270 euros, lo vamos a matar'. Atemorizada, la mujer se puso en contacto con su yerno, residente en España, y le aseguraba que había facilitado a los secuestradores su número de teléfono para que se pusieran en contacto directamente con él y consiguiera la liberación de su hijo.

Los secuestradores no se hicieron esperar y poco después de pusieron en contacto con éste en una conversación en la que los delincuentes permitieron a la víctima hablar con su familiar para demostrarle que era cierto que estaba retenido. Al día siguiente, el negociador de la familia llega mantener una cita con dos de los secuestradores en una zona cercana a la Expo de Zaragoza, en la que los delincuentes insisten que la víctima no será liberada hasta que hayan liquidado 'una deuda' contraída por ésta con ellos en un tema de narcotráfico de hachís. Según fuentes de la investigación, la agresiva actitud de los secuestradores en ese encuentro llevó entonces a la familia a denunciar los hechos ante la Policía.

A partir de ese momento, la Sección de Secuestros de la UDEV se hizo cargo de la investigación y pudo averiguar rápidamente el verdadero móvil del secuestro y, sobre todo, la identidad de varios de los presuntos secuestradores, que resultaron ser los hermanos El Ayd y Mimoune I., y Ahmed L., de entre 26 y 24 años de edad.

Uno de los secuestradores huyó y fue capturado finalmente ayer

Finalmente, y después de varias llamadas de éstos en la que siguen amenazando con matar al secuestrado si su familia no saldaba en un corto espacio de tiempo la deuda, se acordó la entrega del rescate a última hora del 5 de octubre en un área de servicio cercana a la capital aragonesa. Cuando dos de los delincuentes llegaron para recoger el dinero, fueron detenidos por la Policía.

Poco después, los agentes localizaban en un campo situado entre los municipios de Fuentes del Ebro y Pina de Ebro el vehículo con la víctima en el maletero y otros dos secuestradores encargados de custodiarla. La Policía consiguió liberar a la víctima y detener a uno de sus raptores. El segundo, que consiguió huír, fue capturado finalmente ayer. La víctima aseguró tras ser rescatado que estuvo prácticamente todo el tiempo encerrado en el maletero del coche, el cuál dejaban ligeramente abierto para que no se asfixiara. Sólo le sacaban para propinarle varias palizas en las que le insistían una y otra vez que si algo salía mal, lo mataría.