La radio digital existe en España desde hace diez años, pero no la escucha nadie. El elevado precio de los receptores, la ausencia de una oferta diferenciada y las mejoras experimentadas en la calidad de las emisiones analógicas, que hacen poco apreciable el salto de calidad que supone la digital, son algunos de los factores que han frenado el desarrollo de esta tecnología en España, según fuentes del sector consultadas por este diario. Además, una legislación poco adecuada y la escasa rentabilidad de la radio digital, junto con los gastos que acarrea, dibujan un panorama poco alentador.

Por eso, en el sector existe cierto escepticismo acerca del plan de digitalización de la radio incluido a través de una enmienda transaccional entre PSOE y CiU en el proyecto de Ley Audiovisual, que fue aprobado el jueves en el Congreso. La enmienda obliga al Gobierno a aprobar el plan de digitalización de la radio en tres años, respetando las actuales concesiones analógicas. Además, tendrá un año para presentar una propuesta de coordinación de ámbito europeo con el mismo fin.

'Hasta ahora ha sido un desastre absoluto... la señal está en el aire, pero nadie lo sabe'

La entrada en vigor de la ley coincidirá en tiempo con la extinción, en abril, de las concesiones de dos de los tres múltiplex de radio digital concedidos hace diez años, que comprenden en total 18 programas (12 de radios privadas y 6 de RNE). Sin embargo, tras estos años, la radio digital sigue pasando desapercibida. 'Ha habido falta de publicidad, de aparatos... ha sido un desastre absoluto', indica un experto del sector. 'La señal está en el aire, pero los ciudadanos no lo saben', añade.

En cualquier caso, a las radios privadas les ha sentado bien el anuncio del plan. Tal como indicó ayer a Público el secretario general de la Asociación Española de Radio Comercial, Alfonso Ruiz de Assín, la propuesta es positiva, ya que 'revela una voluntad política para abordar la digitalización de la radio', si bien habrá que ver cómo se concreta finalmente. De todas formas, Ruiz de Assín tiene claro que, a diferencia de lo que ha ocurrido con la televisión, en la radio 'no puede haber un apagón analógico' como tal, sino que será necesaria una transición 'hasta que el mercado decida'.

Un apagón supondría hoy un grave problema, ya que en España apenas hay unos cientos de receptores digitales, frente a los cinco millones del Reino Unido, el único país europeo donde este tipo de radio se ha desarrollado con cierta fuerza, aunque sin demostrar una rentabilidad que haya animado a los operadores de otros países.

Las radios privadas ven positiva la voluntad política por la radio digital

Otro problema es la cobertura de la señal digital, que apenas abarca al 50% de la población, según destaca la directora técnica de Onda Cero, Nuria Domínguez, que reconoce que la radio digital sigue sin suponer 'una ventaja diferencial' frente a la analógica. De todas formas, alberga pocas dudas sobre el futuro: 'Nadie duda de que el futuro de la radio será digital; la única duda es cuándo se dará el paso'. Parece que hoy ese momento está un poco más cerca.