Este artículo se publicó hace 14 años.
La situación de Irlanda marcará la reunión de los ministros de la UE
La Comisión Europea enviará una misión técnica conjunta con el FMI y el BCE a Dublín para preparar el rescate
La situación económica de Irlanda es el tema del día en la reunión que mantendrán este miércoles en Bruselas los 27 ministros de Economía y Finanzas de la UE. Ya el martes por la noche, los 16 miembros de la Eurozona (Eurogrupo) analizaron la situación irlandesa y el peligro de contagio a otros países con dificultades presupuestarias.
La Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI) preparan el rescate del sector bancario irlandés, pese a la resistencia del Gobierno Dublín, que insiste en que no necesita la ayuda de sus socios internacionales. Por esa razón, la Comisión Europea ha anunciado que enviará una misión técnica conjunta con el FMI y el BCE a Dublín para intensificar los trabajos preparatorios de un eventual rescate.
"El Gobierno irlandés se ha comprometido a entablar unas discusiones cortas y concretas con la Comisión Europea, el BCE y el FMI para determinar la mejor manera de proveer cualquier apoyo necesario para afrontar los riesgos del mercado, especialmente en lo referente al sector bancario", dice un texto acordado el martes por los ministros de Finanzas de la zona euro.
Las medidas que adoptó Irlanda no han dado sus frutos
El documento aprobado anoche por los ministros de Finanzas del euro especifica que las medidas adoptadas por Irlanda para garantizar la estabilidad de su sector bancario (mediante garantías, recapitalizaciones y separación de los activos) no han servido para normalizar "las condiciones de mercado", por lo que han aumentado las preocupaciones que indican la necesidad de "más reformas y medidas de estabilización".
En este sentido, el comunicado celebra que Irlanda se haya comprometido a mantener conversaciones con la Comisión, el FMI y el BCE encaminadas a preparar un eventual rescate, en caso de que el Gobierno irlandés se decida finalmente a solicitarlo. En declaraciones a la emisora RTBF, el ministro belga de Finanzas, Didier Reynders, que participó en la reunión del Eurogrupo, comentó que el problema de Irlanda radica en que el Estado "no puede soportar el peso de un sector bancario demasiado grande para el país".
La decisión de pedir ayuda corresponde al Gobierno de Dublín, que recela
Sin embargo, todo sigue en el aire pues, como explicó el presidente del Eurogrupo y primer ministro luxemburgués, Jean Claude Juncker, la decisión de solicitar la ayuda de la comunidad internacional sólo corresponde a Irlanda.
De momento, el primer ministro irlandés, Brian Cowen, sigue insistiendo en que su Gobierno no ha solicitado de momento ninguna ayuda europea. Irlanda desea evitar las duras condiciones a las que está sujeto el mecanismo de ayuda europeo aprobado tras la crisis en Grecia la pasada primavera, por considerar que acarrearía una merma de su soberanía. Entre otras cosas, Dublín teme que sus socios europeos le exijan que genere más ingresos mediante una subida del impuesto de sociedades, que la isla mantiene en el 12,5% para atraer las inversiones de multinacionales.
Un rescate de 100.000 millonesDistintas fuentes apuntan a que el rescate de la banca podría estar acompañado de un paquete de ayudas al Gobierno, que contaría con dinero extra aportado por Reino Unido. En ese supuesto, el rescate total alcanzaría la cifra de 100.000 millones de euros, según apuntó el diario Wall Street Journal. La operación, similar a los 110.000 millones comprometidos para Grecia el pasado mes de mayo, obligaría a Irlanda a llevar a cabo un amplio saneamiento de su sector financiero. Además, supondría dejar de seguir exclusivamente las indicaciones de Bruselas para acatar un plan de reformas y recortes decidido de forma conjunta entre la Unión Europea y el FMI, que tras el rescate de Grecia crearon un fondo de 750.000 millones.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.