Spanair ocultó que el avión abortó un despegue hace un mes en Palma

El MD-82 que se estrelló hace una semana en Barajas había sufrido hace sólo un mes un problema que obligó a abortar el despegue en el aeropuerto de Palma de Mallorca. El Sunbreeze iba a efectuar el trayecto entre la isla y Copenhague el pasado 26 de julio, cuando el comandante decidió anular la salida tras detectar un ruido extraño en el tren de aterrizaje. En toda esta semana, Spanair no reveló este problema con el argumento de que "no era digno de mención". Y ahora se niega a detallar si la nave pasó por algún otro episodio similar.

De hecho, fue un diario danés el que reveló el martes la noticia. El rotativo Ekstra-Bladet publicó las fotos y el testimonio del amigo de una pasajera del JK037, que se puso en contacto con el diario tras enterarse del accidente de Barajas.

La compañía confirmó el martes a Público que el problema revelado por el diario danés era cierto y que lo había sufrido el mismo aparato que se estrelló en Barajas, aunque negó que se tratara de una "avería". Según su versión, el comandante del vuelo tenía previsto realizar el trayecto de Palma de Mallorca a Copenhague a las 7.30 horas. Una vez en la pista de despegue y cuando se disponía a levantar el vuelo, "al piloto le pareció oír un ruido más alto de lo normal en el tren delantero de aterrizaje".

El avión regresó al parking y tras pasar una revisión de 37 minutos volvió a la pista y despegó "sin más incidencias" a las 8.14, según la compañía. El vuelo completó el trayecto sin más problemas conocidos.

Vibraciones violentas

Frente al aséptico relato de Spanair, Jan Persson -el danés que cita Ekstra-Bladet- dijo que "las vibraciones eran tan fuertes que algunos pasajeros temieron que saltara la puerta de emergencia".

Además de haber ocultado ese incidente -término que usan las empresas de aviación para denominar cualquier problema que no sea un accidente- Spanair se negó a aclarar si el avión que se estrelló el miércoles pasado tiene alguna otra avería en su historial. La empresa sólo ha revelado el número de revisiones oficiales que ha superado en 2007 (12 aleatorias y la obligatoria anual) y en 2008 (36).

La aerolínea no quiso facilitar las "acciones de mantenimiento" que se le habían realizado al aparato hasta que se estrelló el pasado día 20. "Es muy difícil saberlo porque habría que ver todos los vuelos que realizó el avión. Se puede buscar, pero nos llevaría muchas horas. No manejamos esa información. Si es secreta, se pasará a la investigación", reconoció finalmente.

Secreta o no, la comisión de investigación de Aviación Civil ya "ha requerido" el citado informe de mantenimiento "a la empresa", dijo el martes su secretario, Francisco Soto. Hasta la tarde del martes, no le constaba haberlo recibido.

Psicosis de seguridad

La obsesión por la seguridad ha multiplicado las precauciones de pilotos y compañías. En Barajas, los motores de varios aviones fueron revisados "minuciosamente" por los técnicos en la madrugada del domingo, lo que es "inusual y extraño", según trabajadores del aeropuerto.