La bailarina Tamara Rojo ha opinado hoy que el Código de Buenas Prácticas es "imprescindible" en cultura para que las elecciones de los responsables de las unidades "se hagan desde la independencia y la objetividad" y ha añadido que esta práctica "debería ser extensible a todo".

"A mí me da esperanzas que un jurado considere alguna vez que soy apta para dirigir una compañía. Es como se deben hacer las cosas", ha apuntado hoy Tamara Rojo, primera figura del Royal Ballet de Londres, al ser preguntada por la puesta en práctica de este Código impulsado por el anterior ministro de Cultura, Cesar Antonio Molina.

Tamara Rojo hizo estas declaraciones en la presentación en el Teatro Real de un programa de promoción de la Danza Clásica a través de un convenido firmado por los Ministerios de Cultura y Educación, el Instituto Superior Alicia Alonso de la Universidad Rey Juan Carlos y el Ayuntamiento de la localidad madrileña de Fuenlabrada.

El acuerdo contempla la creación de diez premios nacionales de danza clásica para estudiantes menores de 23 años con una dotación, a cargo del Ministerio de Educación, de 60.000 euros, y la producción de un montaje anual del repertorio clásico internacional con una dotación del Ministerio de Cultura de 75.000 euros.

La producción, cuyo primero montaje será "Copelia", tendrá un mínimo de doce representaciones en los teatros del Ayuntamiento de Fuenlabrada, que destinará a este convenio 160.000 euros, mientras que la Universidad Rey Juan Carlos hará inversiones por valor de 2.540.000 euros para infraestructuras y destinará anualmente una partida de 360.000 euros para los gastos de este convenio.

Este programa de promoción de la Danza Clásica es para el nuevo director del Instituto Nacional de Artes Escénicas, Félix Palomero, "un ejemplo de política cultural" por la colaboración entre las distintas administraciones, mientras que para la secretaria de Estado de Educación y Formación Profesional, Eva Almunia, se trata de una ratificación de que "es necesario el esfuerzo de todos para la formación de nuestros jóvenes".

La secretaria de Estado apuntó también que este acuerdo es "una ratificación" de la Ley Orgánica de Educación que en 2006 dio categoría de estudios superiores a las disciplinas artísticas, algo que la Universidad Rey Juan Carlos ha consolidado a través del Instituto Universitario de la Danza Alicia Alonso que cuenta hoy con 254 alumnos.

Tamara Rojo, que es considerada como la madrina de este programa, ha apuntado que se trata de un proyecto "importante y necesario" para impulsar las carreras de los jóvenes que quieren hacer carrera dentro de la danza clásica en España.

La bailarina señaló que su propuesta para la creación de una compañía de ballet clásico en España "quedó en nada" porque "nunca" recibió una contestación, aunque cree que ha servido para inspirar el proyecto de una Compañía Nacional de Danza Clásica.

No quiso opinar sobre el proyecto en este terreno de Víctor Ullate porque "no lo conozco", aunque dijo que espera que sea "otro paso hacia el desarrollo de la danza clásica en nuestro país".

En este sentido, Félix Palomero subrayó que el Gobierno trabaja para resolver "las lagunas" de la cultura española y, en este terreno, ha realizado un Plan de la Danza y creado "canales de comunicación" para "dar la voz a todos los sectores".

Palomero apuntó también que no hay que ver con "victimismo" ni "en términos de exilio" que artistas españoles trabajen actualmente fuera de España porque "es bueno" que estén triunfando fuera y enriqueciendo al país de "otras experiencias y perspectivas".