Este artículo se publicó hace 15 años.
Tres años de prisión por prostituir a una adolescente
Médicos del Mundo denuncia que falta mayor protección a las víctimas
El principal acusado de prostituir a una menor rumana, de 15 años de edad, en un club de alterne de Rincón de Soto (La Rioja) aceptó ayer una pena de tres años de cárcel por los hechos. El juicio, celebrado en la Audiencia Provincial de Logroño, ha quedado visto para sentencia tras aceptar los tres acusados las penas propuestas por los delitos de prostitución y contra los derechos de los trabajadores.
Los hechos juzgados se remontan al año 2006, cuando el principal acusado trajo de Rumania a tres mujeres y a la hija de una de ellas, de 15 años, a las que pagó el viaje a cambio de que ellas devolviesen el dinero con su trabajo. El hombre, ya en España, las obligó a prostituirse y les quitó los pasaportes. La menor estuvo esclavizada durante dos semanas, con una media de cuatro o cinco servicios diarios.
Denuncia
Si las mujeres presentan denuncia, pueden acogerse a la ley de protección de testigos, pero esta es "insuficiente" para las ONG que trabajan con víctimas de tráfico sexual como Médicos del Mundo. La ley "fue aprobada en 1994 y consta únicamente de cuatro artículos. En ella se establece que en el plazo de un año se dictarían las disposiciones reglamentarias necesarias para su ejecución. Sin embargo, casi 15 años después, aún no se ha dictado un reglamento al respecto", critica María del Río Pereda, de Médicos del Mundo.
Para esta ONG, las medidas de protección que se ofrece a las víctimas están diseñadas sólo en función de su voluntad de colaboración. "Solamente si la víctima coopera o ayuda proporcionando datos esenciales o testificando, se le facilitará el retorno a su país o la estancia y residencia en España", denuncia Del Río. "Es necesario que sea el Estado quien se encargue de ofrecer estas ayudas. Por ahora, las posibilidades de la víctima de recibir ayuda dependen, en gran medida, del lugar en el que se encuentre", concluye esta especialista.
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