La UE pide que Teherán investigue las denuncias

La Unión Europea puso ayer en duda la aplastante victoria del conservador Mahmud Ahmadineyad y pidió a las autoridades electorales de Irán una investigación. Los 27 ministros de asuntos Exteriores respaldaron así las dudas de "varios candidatos" de la oposición, entre ellos Mir Hussein Musavi, sobre la validez de las elecciones presidenciales celebradas el viernes.

La UE está "seriamente preocupada", según el texto de conclusiones, por "la violencia en las calles y el uso de la fuerza contra manifestantes pacíficos", en relación a las muestras de apoyo a Musaví, que ayer se cobraron la primera víctima mortal. Desde Washington, el Departamento de Estado de EEUU manifestó estar "profundamente molesto" por la "violencia, detenciones y posibles irregularidades en el voto", según un portavoz, que evitó pedir una investigación.

Varios países de la UE, liderados por Alemania, el Reino Unido y Francia, identificaron "indicios de irregularidades", en palabras de la canciller Angela Merkel. El jefe de la diplomacia británica, David Miliband, aseguró estar "seriamente preocupado" por las consecuencias de la inestabilidad política en Irán en relación con "el compromiso que la comunidad internacional pide del Gobierno de Irán" en materia de enriquecimiento de uranio. "La manera en la que el régimen responda a las protestas legítimas tendrá implicaciones para la relación de Irán con el resto del mundo", amenazó el primer ministro, Gordon Brown.

Diplomáticos europeos barajan además la posibilidad de establecer sanciones económicas o comerciales al país si no se despejan las presuntas irregularidades, lo que se sumaría a las condenas que el Consejo de Seguridad de la ONU ha impuesto a Teherán por su programa nuclear.

Miguel Ángel Moratinos, el ministro de Exteriores español, recordó que "corresponde a las autoridades iraníes clarificar cómo se han producido las elecciones". La estrategia de la UE, según Moratinos, pretende encaminar a Irán a "responder de forma positiva" a la oferta de diálogo que le había lanzado el presidente de EEUU, Barack Obama, pero antes sus autoridades tendrán que aclarar las irregularidades denunciadas. El Ministerio del Interior iraní y el propio Ahmadineyad aseguran que el resultado es justo y consideran "libre y sano" el desarrollo de la jornada electoral.

El ministro israelí de Asuntos Exteriores, Avigdor Lieberman, aprovechó su invitación a Luxemburgo para cargar contra la que considera "la mayor amenaza para Oriente Medio por su programa nuclear", aunque eludió pronunciarse sobre la limpieza de las elecciones por tratarse de un asunto interno.