Umberto Eco gana el Premio Reino de Redonda por el conjunto de su obra

El ensayista y novelista italiano Umberto Eco, uno de los intelectuales europeos de mayor prestigio, ganó hoy el Premio Reino de Redonda por "la increíble agudeza de sus ensayos" y por su "casi inabarcable erudición y su curiosidad infatigable".

Estos son algunos de los motivos que aduce el jurado de este galardón, creado en 2001 por la editorial Reino de Redonda, fundada por el escritor español Javier Marías, para distinguir anualmente la obra de un escritor o cineasta extranjero y de lengua no española.

El galardonado en 2008 mereció también esta distinción por "su capacidad de renovación de los géneros novelísticos clásicos, a los que ha dado impulso, originalidad y nueva y larguísima vida, de la novela histórica a la detectivesca, de la de intriga a la fantástica y aun a la científica".

Nacido en Alessandria (Italia) en 1932, Umberto Eco estuvo en la ciudad andaluza de Granada la semana pasada, participando en el "Hay Festival", en el que fue uno de los escritores que mayor expectación suscitó.

Eco es autor de unos cincuenta libros, la mayoría de los cuales han sido traducidos al español.

Entre sus ensayos figuran "Obra abierta", "El super-hombre de masas", "Los límites de la interpretación", "Lector in fabula" o el recientísimo "Decir casi lo mismo", sobre la traducción.

Entre sus novelas figuran "El nombre de la rosa", que le dio fama mundial, "El péndulo de Foucault", "La isla del día de antes", "Baudolino" y "La misteriosa llama de la reina Loana".

Eco, eminente semiólogo, novelista, Premio Príncipe de Asturias y doctor honoris causa por 25 universidades de todo el mundo, es también un gran estudioso de James Bond y Sherlock Holmes.

Tras saberse ganador del Premio Reino de Redonda, el galardonado se declaró "feliz de entrar a formar parte de este reino" imaginario patrocinado por Marías y, dado que también él ha hablado "de una isla que no existe", adoptó el título de "Duke of Isla del Día de Antes".

"En mi novela 'La isla del día de antes' he hablado de una isla inaccesible, no sólo en el espacio como Redonda sino también en el tiempo, salvo que mi isla estaba desierta, mientras que me doy cuenta de que Redonda está pobladísima de insignes amigos que me acompañarán en mi mirarla de lejos", dijo Eco tras conocer el fallo.