Unicaja autoriza la negociación con Caja Castilla La Mancha

Unicaja anunció el jueves que su consejo de administración había sido informado de los contactos mantenidos con Caja Castilla La Mancha (CCM) y autorizó por unanimidad a su presidente Braulio Medel para desarrollar los trabajos y conversaciones pertinentes para un posible proyecto de integración entre ambas entidades.

"Tal posible proyecto de integración quedaría condicionado a los correspondientes estudios de viabilidad económica y financiera, a la aprobación de los respectivos órganos de gobierno y a las autorizaciones públicas preceptivas", explicó la caja andaluza en un comunicado.

Esta entidad explicó además que el Banco de España, el Ministerio de Economía y Hacienda y los gobiernos autonómicos de Andalucía y Castilla-La Mancha estaban al tanto de las conversaciones.

Además, la caja andaluza añadió que "una potencial unión de Unicaja y CCM no sólo no excluiría en un futuro la fusión con otras entidades, sino que quedaría abierta a las mismas y, en particular, a las de otras entidades de Andalucía y Castilla-La Mancha".

CCM PIDE TRANQUILIDAD Y MIRA ALTERNATIVAS

La víspera, el presidente de Caja Castilla La Mancha, Juan Pedro Hernández Moltó, quiso trasladar un mensaje de "absoluta tranquilidad" y confianza a los clientes y a los empleados sobre la situación institucional de la entidad, al tiempo que reconoció que el consejo estudiará futuras oportunidades que contribuyan a la solidez de la caja.

Moltó no pronunció en su discurso ni la palabra fusión ni tampoco mencionó a Unicaja, si bien aseguró que "no va a dejar por estudiar ni una sola de las alternativas que pueda haber en el futuro" y añadió que se analizarán "todos los planteamientos que tengan como objetivo fundamental que esta caja sea una entidad de futuro".

La declaración institucional de Moltó se produjo en la noche del miércoles en Toledo a la conclusión del consejo de la caja castellano-manchega y después de que los presidentes socialistas de Castilla-La Mancha y Andalucía, José Luis Barreda y Manuel Chaves, respectivamente, hubieran alentado con sus declaraciones de esta semana las expectativas de una fusión entre la caja manchega y Unicaja.

Hasta el momento, el principal obstáculo a los procesos de consolidación entre las cajas está siendo precisamente la capacidad de veto que tienen los partidos políticos.

Recientemente, las diferencias políticas dieron al traste con el proyecto de fusión de las cajas vascas BBK y Kutxa.

El propio presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), Juan Ramón Quintás, reconoció el jueves que en la actualidad había varios proyectos de fusión en marcha entre cajas, pero no consideraba que pudieran fructificar más de dos operaciones en 2009 debido a la capacidad de veto de los gobiernos autonómicos.

En el actual contexto de deterioro de la economía española y de crisis internacional de los mercados de crédito, expertos consultados por Reuters vaticinan un proceso de concentración en el sector de las cajas.

Analistas y expertos coinciden en señalar que las cajas son más vulnerables ante el actual cambio de ciclo económico, porque alrededor de unas tres cuartas partes de su cartera crediticia se concentra en el estancado negocio inmobiliario.

Junto a la ralentización del negocio bancario se está observando además una tendencia generalizada al alza en los índices de morosidad de todas las entidades del sistema financiero español.

Según datos del Banco de España a diciembre, la tasa de morosidad de las cajas de ahorros se situó en el 3,79 por ciento, frente al 3,63 por ciento de noviembre.

Quintás consideró el jueves que las cajas podrían finalizar con una morosidad del 7 por ciento en 2009.

(Información de Jesús Aguado, Editado por Carlos Ruano)

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