El Cuatro Rayas Valladolid se aseguró la segunda plaza del grupo C y el derecho a disputar en casa el partido de vuelta de los octavos de final, tras imponerse por 35-26 al Kadetten Schaffhausen suizo, una ventaja con la que no podrá contar el Barcelona Borges, pese a su triunfo (27-30) sobre el Celje esloveno.

Todo lo contrario que el Renovalia Ciudad Real, que no sólo jugará la vuelta de la siguiente eliminatoria de la Liga de Campeones en el Quijote Arena, sino que lo hará además ante un rival teóricamente inferior, tras concluir como líder del grupo D, al imponerse el pasado jueves por 25-34 en la pista del Constanta rumano.

Un triunfo que garantiza al conjunto manchego medirse en los octavos de final con un cuarto clasificado, terna en la que figuran el Chambery francés, el Kadetten helvético y el perdedor del encuentro que enfrentará mañana al Hamburgo alemán con el Kolding danés.

Rivales que, con excepción del Hamburgo, no deberían plantear excesivos problemas a un Ciudad Real que confía en poder contar para los octavos de final con el lesionado Kiril Lazarov, que, pese a perderse los tres últimos encuentros, sigue siendo el máximo goleador de los manchegos en la máxima competición continental.

Una responsabilidad anotadora que asumió ante el Constanta rumano el extremo David Davis, que añadió a su habitual solidez defensiva una efectividad ante el gol que convirtió al internacional español, autor de seis tantos, en la principal referencia ofensivo de los de Talant Dujshebaev.

Protagonismo que acaparó por completo en el Cuatro Rayas Valladolid el "eterno" portero sueco Tomas Svensson, que a sus 43 años dio toda una exhibición bajo los palos ante un Kadetten Schaffhausen que se estrelló una y otra vez contra la defensa castellana.

Ni la presencia en el conjunto helvético de cañoneros como el estonio Mait Patrail, que se quedó en tan solo tres tantos, sirvió al Kadetten para inquietar a un Valladolid que apabulló por completo (35-26) a los suizos en la segunda mitad.

Amparado en el inexpugnable Svensson, el equipo de Juan Carlos Pastor mostró en los segundos treinta minutos su mejor cara en ataque, bajo la perfecta dirección de un comedido Óscar Perales, que permitió lucirse al lateral Nenad Bilbija y los extremos Havard Tvetden y Guillaume Joli.

Triunfo que permitirá al Cuatro Rayas Valladolid contar con la ventaja de campo en los octavos de final, un factor que se antoja decisivo para los castellanos, dado el potencial de los posibles rivales, entre los que figuran el Barcelona Borges, el Croatia Osiguranje Zagreb y el ganador del duelo entre el Hamburgo y el Kolding.

Tampoco lo tendrá sencillo el equipo azulgrana en la siguiente ronda, a la que accederá como tercer clasificado del grupo A, pese al triunfo (27-30) cosechado hoy en la pista de todo un excampeón de Europa como el Celje Pivovarna Lasko, que con esta derrota se despide de la competición.

La solidez defensiva del Barcelona, unida al acierto en los minutos finales de Siarhei Rutenka, permitió a los de Xavi Pascual sumar un triunfo de prestigio que, sin embargo, no evitará a los azulgranas arrancar la eliminatoria de octavos en el Palau.

Duelo en el que el equipo catalán tendrá como rival a uno de los tres segundos clasificados con los que compartirá bombo en el sorteo del próximo lunes en Viena, entre los que figuran el Valladolid, el Flensburgo alemán y el perdedor del duelo que medirá mañana al Montpellier francés y el Veszprem húngaro.