Fernando Verdasco, maltrecho físicamente, condicionado por una microrrotura abdominal y un callo en el pie izquierdo, busca su reingreso en las semifinales de un Grand Slam, la primera vez en el Abierto de Estados Unidos, ante el serbio Novak Djokovic, entre los mejores del torneo en los últimos dos años.

El madrileño, guiado por la dinámica que le impulsó a la conquista del torneo de New Haven, el primero que logró en pista dura y fiel a los principios que le dispararon al inicio del curso hacia las semifinales del Abierto de Australia, asume tocado una de sus citas más trascendentes del curso ante un adversario de enjundia.

No son al aire las quejas del madrileño, apartado del equipo español de la Copa Davis por su precaria situación y la falta de tiempo para una nueva puesta a punto. A voluntad propia.

"Aguanto como puedo", reconoció el madrileño tras dejar el Abierto de Estados Unidos sin representación local, una vez derrotado John Isner.

Verdasco acumula partidos en pista dura. A los cinco de New Haven se han sumado los cuatro de Nueva York. Un día sí y otro no. Sin tiempo para recuperación. "He asumido que hay que jugar así. Con dolor", afronta el madrileño.

Verdasco se topa con Djokovic. "En cuartos de final es impensable que te toque otro jugador. A estas alturas sabes que tienes que jugar contra un grande", explicó el español.

El serbio, irregular y dubitativo al principio del torneo, ofreció su mejor versión ante el checo Radek Stepanek, al que ventiló por la vía rápida y que resguardó fuerzas para montar un show sobre la cancha con el legendario, metido ahora a funciones de comentarista, John McEnroe. Le gusta al balcánico. Mal acoplado a las derrotas y exultante con los triunfos.

Es el Abierto de Estados Unidos un torneo a su medida. En una pista acoplada a sus movimientos. Aunque siempre se ha estrellado con Federer, que le privó del éxito hace dos años en la final y le dejó en semifinales el pasado curso.

"Fernando es un gran jugador que está en un buen momento. Es muy duro físicamente y está jugando muy bien", dijo el serbio, que recordó que el madrileño acaba de ganar el torneo de New Haven, en vísperas del último Grand Slam del año.

Djokovic, que ha eliminado al checo Radek Stepanek, sufrió ante el estadounidense Jesse Witten y superó al australiano Carlesn Ball además del croata Ivan Ljubicic, ha ganado a Verdasco en tres de las cinco veces que se han enfrentado. Las tres últimas. La más reciente en los cuartos de final del Masters 1000 de Montecarlo, cuando el madrileño le tuvo contra las cuerdas.

Verdasco no le gana desde el 2006, en el Masters Series de Hamburgo. Y antes, hace cuatro años, en este mismo escenario, en el Abierto de Estados Unidos, en la cuarta ronda.