El veredicto de un juicio que enfrenta al ex primer ministro francés Dominique de Villepin contra el presidente Nicolas Sarkozy se conocerá el 28 de enero, dijo el viernes el tribunal.

El aristócrata Villepin, ex diplomático y rival acérrimo de Sarkozy cuando ambos eran ministros en el Gobierno del ex presidente Jacques Chirac, está acusado de tomar parte en una trama fallida para destruir la candidatura de Sarkozy al poder en 2007.

El juicio llegó cerca del final el viernes después de semanas de un drama legal que ha salpicado a la élite política francesa.

Los fiscales han tratado de demostrar que Villepin estaba implicado en unos documentos falsificados que implicaban a Sarkozy y decenas de personas más de la élite política y empresarial. Los papeles fueron enviados a un juez que investigaba un caso de sobornos en un acuerdo por venta de armas que se remonta a los años 90.

La Fiscalía ha pedido 18 meses de cárcel en suspenso y una multa de 45.000 euros para Villepin y cárcel para los dos acusados de estar detrás de la supuesta trama.

Villepin ha rechazado la acusación y dice que él es una víctima del rencor del presidente.

El viernes pareció tender una rama de olivo a Sarkozy.

"Tiendo mi mano a Nicolas Sarkozy. No tengo resentimiento en mi interior y quiero servir a los franceses en el lugar que me merezco", añadió.

Ambos políticos se juegan mucho.

Un veredicto de culpabilidad acabaría casi con toda seguridad cualquier ambición política que aún tenga Villepin, pero, si es absuelto, sería una bofetada para Sarkozy y podría dar un motivo para el descontento de fondo en su propio partido.

Los detalles del caso, centrado en una lista falsificada de "cuentas secretas" supuestamente abiertas en la institución financiera luxemburguesa Clearstream y presuntamente vinculadas a sobornos y corrupción, son complejas y controvertidas.