La versión positiva y étnica de Manolo García llena de optimismo a sus seguidores

Un Manolo García cargado de energía positiva ha logrado contagiar su optimismo a los miles de predispuestos seguidores reunidos hoy en el concierto que ha ofrecido en Valencia dentro de la gira para presentar su nuevo disco, "Saldremos a la lluvia", un trabajo repleto de tintes étnicos y sembrado de letras esperanzadoras.

La plaza de toros de Valencia ha acogido el quinto concierto de la gira española del cantante de "El último de la fila" -el sexto si no se hubiera cancelado el que tenía previsto celebrar en Elche- que inició el pasado 31 de mayo en el Palacio de los Deportes de Granada ante 8.000 espectadores ávidos de su directo después de tres años alejado de los escenarios.

Desde el primer sencillo de su nuevo álbum, "No estés triste", hasta la ranchera con la que ha acabado el concierto, todo un canto a la felicidad, García ha ofrecido un espectáculo basado en su último trabajo en el que lanza, según sus propias palabras, un "mensaje enérgico, comprometido y esperanzador".

Más de 9.000 gargantas han acompañado esta noche a una de las voces más singulares del panorama musical español durante las dos horas y veinte minutos que ha durado su espectáculo, un montaje en el que han trabajado 137 personas para levantar un escenario de cuarenta toneladas con un equipo de sonido de 200.000 vatios y 500.000 más de iluminación.

Después de tres años de espera, el solista no ha querido torturar más a sus seguidores y a las 22.00 horas, con puntualidad británica, se subió a un escenario engalanado con cientos de crespones de colores para, sentado en una silla y con una guitarra en el regazo, entonar los primeros acordes de "Provincia de Río Negro", uno de los sencillos de "Saldremos a la lluvia".

Tras la primera hora de concierto, en la que García ha presentado la mayoría de los temas de su nuevo disco en solitario, el público se puso en pie para disfrutar de una segunda parte con versiones de sus temas más clásicos y mucho más arraigados entre sus fans.

La segunda parte ha sido un repaso a sus tres primeros discos editados a lo largo de diez años de carrera en solitario salpicado con temas de "El último de la fila" como "Insurrección", una de las canciones más aplaudidas por el público.

El cantante ha saltado al ruedo, literalmente, para mezclarse con la gente que abarrotaba la arena de la plaza de toros de Valencia mientras entonaba otro de sus grandes éxitos, "A San Fernando, un ratito a pie y otro caminado".

García ha estado acompañado por diez músicos, entre ellos, el griego Stelios Petrakis a la lira, uno de los músicos cretenses que ha colaborado en la grabación del álbum.

Además, una bailarina ha amenizado algunos de los temas con un baile mezcla de estilos contemporáneo, clásico, flamenco y breakdance que ha arrancado verdaderas ovaciones del público.