Público
Público

El vicepresidente del Barcelona Godall afirma que con "el Barça no se puede hacer política"

EFE

El vicepresidente primero del FC Barcelona, el empresario Alfons Godall, ha sido tajante en una entrevista concedida a la Agencia EFE al referirse a que con el Barça "no se puede hacer política" porque a los socios y aficionados "no les gusta".

Godall se ha definido ya como firme aspirante a liderar una precandidatura en las elecciones del FC Barcelona, aunque concretará su posición en las próximas semanas, después de que se acaben de definir posturas de personas determinantes en el club, como por ejemplo la del vicepresidente Jaume Ferrer, quien ya ha dado el paso decidido para aspirar a la presidencia.

En el encuentro de EFE con Godall, el vicepresidente primero ha asegurado que Ferrer "tiene las puertas abiertas" de su equipo, pero advierte que no cederá a ninguna presión a la hora de confeccionar la precandidatura, en el intento aunar un grupo único desde dentro del club y no salir a la escena electoral con dos propuestas, como en estos momentos existen.

"Le he dicho (a Ferrer) que tiene las puertas abiertas de nuestra propuesta para incorporarse cuando él quiera, sin condiciones, sin cuotas, sin hablar de cargos ni hipotecas. Después de la etapa de Laporta nos jugamos mucho porque el modelo ha funcionado. Nuestra voluntad es que haya una opción que recoja esta experiencia, pero también que sea capaz de introducir savia nueva, un proyecto ilusionante y de equipo", señaló.

Godall añadió que le gustaría "recuperar" para su proyecto a viejos compañeros de junta, como es el caso de Ferran Soriano, actual presidente de Spanair, y dimitido en el verano del 2008 junto a siete directivos más tras la crisis que se originó en el club con la moción de censura contra el consejo directivo que preside Joan Laporta. Hasta la fecha, Soriano aún no ha desvelado los planes que tiene para las elecciones de esta primavera.

El vicepresidente primero del Barça ha reconocido que le atenazaron muchas dudas cuando Laporta le animó a tomar las riendas para lanzarse al ruedo electoral, pero desveló que desde hace unos meses "una serie de circunstancias personales" le posicionaron con nitidez en la parrilla de salida preelectoral, pues se considera capaz de alcanzar la presidencia por la "experiencia acumulada" y porque conoce "bien los mecanismos de gestión de la entidad".

"Ha sido un privilegio haber acompañado estos años a Laporta. Creo que con el tiempo todo el mundo acordará que la etapa de Laporta ha sido magnífica. Es cierto que algunos aspectos de su personalidad han sido discutibles, pero con él he aprendido mucho. Su etapa ha sido histórica y muy provechosa. El club es más grande y la marca Barça, mundial. Hemos pasado del 'més que un club' al 'more than a club'", ha argumentado.

"También he aprendido de aquello que no ha gustado y que no ha ido bien", añadió Godall, quien no tuvo ningún problema en reconocer algunos de los pecados de Laporta, que él ha asegurado que no posee, como ser "excesivamente pasional a la hora de transmitir su pensamiento o el estado de ánimo".

Del contenido de su propuesta, Godall defendió el modelo de club que hasta entonces se ha impuesto en el Barça, y en la parcela ejecutiva, apostó por mantener a Txiki Begiristain como secretario técnico y a Josep Guardiola, con quienes pretende hablar en breve.

"El proyecto futbolístico se sustenta en continuar con el modelo de éxito que hemos tenido hasta ahora. Este modelo implica asumir un determinado estilo de juego, atractivo y ofensivo. Creemos que el resultado llega como consecuencia de la práctica de un estilo de juego. Para contar con este estilo, el Barça ha de seguir contando con jugadores de la cantera, porque se lo creen", aclaró.

"La estabilidad durante estos años ha funcionado gracias a la existencia de una secretaría técnica. Haremos lo posible para que siga Txiki. Apreciamos su trabajo, y ahora tenemos al Txiki más valioso, porque tiene la experiencia adquirida de estas temporadas, conoce a los agentes, a los jugadores, la dinámica del mercado y sus mecanismos", argumentó.

Dos de las personas que acompañarán a Godall en su aventura son el actual directivo Xavier Sala i Martín y el director general corporativo, Joan Oliver, quienes no disfrutan de muy buena prensa, tampoco en un sector de la junta, hecho que no acaba de encajar con la idea que tiene de ellos el vicepresidente primero.

"A veces por desconocimiento se pueden tener posiciones de prejuicio que no se corresponde con la realidad. Es un lujo tener con nosotros a Sala i Martín porque es una autoridad en materia económica. En el Barça del futuro, Sala suma porque tiene un perfil internacional y académico de mucha altura. A Oliver, es posible que haya quedado afectado por el episodio de las famosas auditorías de seguridad. En su día ya dije que fue un lamentable error", recordó.

"Hay gente que los tilda de determinada militancia política (son miembros de la Fundación Catalunya Oberta, un 'lobby' próximo a los nacionalistas catalanes), pero ambos no tienen vinculación política ni siguen consignas. Son independientes. Yo también soy de los que piensa que con el Barça no se puede hacer política. En todo caso, sí que podemos hacer un Barça respetuoso con su historia y su catalanidad", razonó.

Finalmente, Godall se refirió al socio barcelonista mejor colocado en las encuestas de intención de voto, como es el vicepresidente deportivo dimitido en el 2005 Sandro Rosell, quien ha anunciado que entrará en escena en el momento en que la junta directiva dé a conocer el calendario electoral.

"Por la experiencia que tengo con él de haber estado en la misma junta, es una persona que tiene una concepción demasiado presidencialista y personalista de la gestión. Sandro Rosell será, por encima de todo, sandrista o rosellista y creo que la clave en estas elecciones es librarnos de todos los ismos. La base de Rosell creo que nace desde el rencor y la revancha", concluyó.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias