Villar de Cañas, Cuenca, se suma a albergar el almacén nuclear

El municipio conquense de Villar de Cañas es el tercero que aspira a albergar el Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares tras autorizarlo en un pleno, informó el miércoles la secretaria del Ayuntamiento.

los cuatro votos de los concejales del PP y uno del independiente - su candidatura el pasado 22 de enero, aunque la decisión no ha trascendido hasta hoy, explicó a Reuters Carmen Barco, la secretaria del Ayuntamiento.

De este modo, Villar de Cañas se suma a Yebra, Guadalajara y Ascó, Tarragona, como posibles receptores de la polémica inversión, que albergaría residuos nucleares durante 60 años.

La ubicación del cementerio nuclear, cuyo plazo para presentar candidaturas acaba el sábado, ha dividido a partidos políticos y administraciones locales y autonómicas. También ha generado concentraciones ciudadanas a favor y en contra del mismo.

300 puestos de trabajo durante su construcción y más de un centenar durante su vida útil - mientras que sus detractores denuncian la elevada radiactividad de los residuos, que tienen una vida de cientos de miles de años.

La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, al igual que la Generalitat catalana respecto a Ascó, ya mostró su oposición cuando Yebra anunció su candidatura la semana pasada.

De hecho, el Ejecutivo de José María Barreda solicitó el martes a los servicios jurídicos de la comunidad la presentación de un posible recurso contra la decisión de Yebra "al considerar que hay indicios fundados de que es nulo de pleno derecho por razones de fondo y forma", según los acuerdos del Consejo de Gobierno.

Mientras, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró el martes que la ubicación definitiva del (ATC) se adoptará "con consenso".

Zapatero reconoció que había habido "debate" y que en este tema no estaba primando "la disciplina de partido", pero subrayó que el almacén era necesario y el Gobierno seguiría adelante con el procedimiento establecido.

Las centrales nucleares existentes ya no tienen espacio para almacenar mucho más de las 6.700 toneladas de uranio y plutonio que acumulan en piscinas al borde de la saturación.

El Organismo Internacional de la Energía Atómica recomendó a España en 2008 que acelerara los esfuerzos por encontrar un emplazamiento construido a propósito para almacenar estos residuos nucleares.