Una violinista española en busca de inspiración para componer una nueva obra ha decidido encerrarse en una "burbuja" de cristal en el centro de Madrid, desde la que sólo se podrá comunicar con el mundo a través de un portal de internet.

A partir de hoy y hasta el próximo día 13, Patricia Argüelles permanecerá las 24 horas del día en un habitáculo de poco más de treinta metros cuadrados y de paredes transparentes, a la vista de los peatones que pasarán por la Puerta de Alcalá, en la céntrica plaza de la Independencia.

La artista espera poder inspirarse a través de internet para componer una obra que confía en poder presentar una vez concluida su semana de encierro voluntario en la casa de cristal.

"La gente verá en directo la producción de la obra", adelantó este martes la violinista, quien precisó en declaraciones a Efe que no sabe exactamente "qué puede salir" de su encierro aunque espera que le inspiren los internautas con los que contacte.

El público podrá participar en el proceso creativo de la artista, ya que al lado de la "burbuja" se han instalado cuatro ordenadores para que los peatones puedan contactar con ella.

La compositora, que también ofrecerá actuaciones los días 8 y 12 de noviembre, espera que la experiencia sirva de plataforma a su música y confía en acostumbrarse pronto al nuevo ambiente "artificial" pese a que asegura que nunca ha pasado tanto tiempo sin tener contacto físico con otras personas.

Marta Adamczyk, portavoz del portal Bago.es, promotor del experimento, aseguró que su iniciativa nunca se ha realizado antes.