Zapatero aconseja a Rajoy que Camps le explique su endeudamiento

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha aconsejado hoy a Mariano Rajoy que, antes de reunirse ambos para estudiar la situación de las cuentas públicas, tenga una "sentada previa" con algunos alcaldes del PP como Alberto Ruiz Gallardón o con Gobiernos autonómicos como el de la Comunitat Valenciana.

El presidente del Gobierno ha justificado la propuesta de ese encuentro con dirigentes populares "para ver qué han hecho con los impuestos y qué deuda tienen" y para que demuestren qué política de restricción han practicado.

Zapatero aludía así a los altos niveles de déficit y endeudamiento que tienen tanto el ayuntamiento de Madrid como la Comunitat Valenciana, si bien reconoció que él también, "por supuesto", debería hacer este análisis con algunos gobernantes socialistas.

El presidente del Gobierno anunció hoy que convocará a Mariano Rajoy a una reunión para estudiar la situación de las cuentas públicas, en la que le pedirá al líder del PP que especifique en qué partidas defiende que se aplique la reducción del gasto.

En su réplica a los grupos parlamentarios en el pleno sobre economía en el Congreso, Zapatero consideró que "sería muy difícil" promover un pacto global para atajar la crisis dadas las "divergencias ideológicas" en materia económica que muestran las distintas fuerzas políticas del arco parlamentario, aunque sí se mostró dispuesto a discutir cuestiones concretas.

Zapatero avisó a Rajoy de que le invitará a discutir "las horas que hagan falta" sobre la reducción del gasto público, aunque advirtió de que ése "no es el tema capital" como defiende el líder del PP, y sí lo es "garantizar la protección social", sobre todo la de los más desfavorecidos por esta situación.

El presidente del Gobierno volvió a justificar el aumento del déficit para afrontar la crisis, del mismo modo que en tiempos de bonanza se lograron superávit que han permitido reducir la deuda pública y que hacen ahora posible un mayor endeudamiento.

"(Paul) Krugman decía que el déficit ha salvado al mundo", dijo Zapatero aludiendo al último premio Nobel de Economía.

El jefe del Ejecutivo también mostró su intención de "hablar a fondo" y "con voluntad de acuerdo" con Rajoy en cuestiones como la energía y, sobre todo, la educación, "porque hablar del futuro de la economía y del bienestar de los ciudadanos es hablar de educación".

Zapatero recordó a Rajoy que las grandes partidas del gasto público son las transferencias a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos, y las prestaciones por desempleo, y a partir de ahí los gastos sociales, y por eso reclamó al líder del PP que detalle de dónde reduciría el gasto.

Por otra parte, Zapatero apuntó que es difícil, incluso iniciar, las conversaciones para un pacto conjunto de todos los partidos con el Gobierno, y abogó por seguir buscando acuerdos sobre cuestiones concretas, como ocurrió con las medidas destinadas a ayudar al sistema financiero.

Ya en su discurso inicial había señalado esta dificultad, a pesar de lo cual diversos portavoces, como el de CiU, Josep Antoni Durán i Lleida, le volvieron a reclamar un pacto de Estado.

Zapatero insistió en defender, en lugar de un pacto global, la "suma de esfuerzos" en torno a las grandes líneas de futuro de la economía.

En cualquier caso, aseguró estar a favor de buscar el acuerdo con las fuerzas políticas en cuestiones económicas concretas, porque el diálogo "funcionó" en materias como el sistema financiero, con la aprobación de medidas como la compra de activos, los avales para la banca o, más tarde, el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).

A este respecto, Zapatero señaló que, frente a quienes han criticado que las ayudas a la banca no repercutían en los ciudadanos, las medidas tomadas han permitido unos ingresos para el Tesoro Público de 1.500 millones de euros.