Zapatero cree que el proceso de paz con ETA "sembró una solución definitiva"

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, considera que en el "proceso de paz" con ETA "se sembró una solución definitiva" y lo valora como un acierto de su gestión al frente del Ejecutivo.

"El segundo acierto, aunque suene arriesgado decirlo, fue el proceso de paz. Tengo la convicción de que ahí se sembró una solución definitiva. Tengo esa confianza", asegura en una conversación con "El País" que el diario publica hoy con motivo del décimo aniversario de su llegada a la Secretaría General del PSOE.

En ella cita como primer acierto la retirada de las tropas españolas de Irak.

Entre los errores de su gestión, Zapatero reconoce el cometido en la víspera del atentado de ETA en la T-4 de Barajas, cuando dijo que "estábamos mejor que un año antes", y el "haber estado demasiado tiempo en el debate de si teníamos una crisis o una desaceleración".

"No son dos errores menores y es importante que se conozcan públicamente. Yo he aprendido de ellos", manifiesta el presidente del Gobierno.

Zapatero admite haber pasado "ratos muy malos", sobre todo "a la hora de decidir las medidas de recorte ante el shock económico", y "alguna noche sin dormir".

Así, relata que pasó "en blanco" la noche del 9 al 10 de mayo en la que estuvo primero en contacto telefónico con la vicepresidenta económica, Elena Salgado, que estaba negociando en el Ecofin la reducción del déficit público, y luego estuvo a la espera de la reacción de los mercados. "Digamos que pasé la noche esperando al índice Nikkei", apostilla.

Asegura que la situación económica "es mala, pero ya no muy mala", y explica que aplicará las medidas impopulares que ha adoptado porque debe ser "responsable y ejercer de presidente en lo bueno y en lo malo".

"Lo haré por encima de mis aspiraciones políticas de futuro. Y que nadie dude de que si hay que adoptar nuevas medidas, las adoptaré", agrega Zapatero quien, preguntado por si lo hará aunque conduzca al PSOE a la debacle, responde: "Quiero que se diga que mi partido hizo lo que había que hacer por el bien de España".

El presidente del Gobierno, que sigue sin desvelar si se presentará o no a la reelección -"Permítame que me reserve esa decisión"- afirma que no tiene "una sensación de soledad".

"Soy un presidente comunicativo que habla mucho con los ministros y los dirigentes del partido. Y hablando de soledad, he tenido durante estos años la gran satisfacción de contar con el concurso del Rey, no solo en el plano político, sino también en el personal. Ha sido muy importante para mí, le tengo un gran reconocimiento", señala Zapatero.

Dice que le gustaría pasar a la historia como el presidente que, además de hacer frente a la crisis, transformó la economía y llevó a cabo la tercera gran transición económica de la democracia y, en ese sentido, añade que quiere que esta legislatura sea "la de la transformación económica".