La noche del próximo 8 octubre tendrá lugar un hecho poco habitual en el cielo. Se trata de una “lluvia de estrellas”, las Dracónidas; pero lo que la hace especial es que se prevé una actividad tan intensa que la han catalogado como tormenta de meteoros.

Un grupo de científicos liderados por Jérémie Vaubaillon, publicaron un artículo donde se concluye que éste 8 de octubre habrá dos máximos de actividad en las Dracónidas cuya tasa rondará los 600 meteoros/hora: el primero sobre las 19:00h y el segundo sobre las 22:00h, hora local peninsular (“The coming 2011 Draconids meteor shower”, WGN - the Journal of the IMO 39:3 2011. J. Vaubaillon et al.). Analizando varios modelos de estudio independientes indican una frecuencia en los meteoros 30 veces mayor de lo que es habitual. No es la primera vez que sucede esto, ya que las tormentas de Dracónidas más importantes de las que se tiene constancia datan de 1933 y 1946; fueron mucho más intensas que ésta, donde se estimó el paso de entre 6000 y 10000 meteoros a la hora.

El cometa 21P/Giacobini-Zinner es el causante de estos meteoros. En su paso alrededor del Sol desprende pequeños fragmentos de polvo, llamados meteoroides, que son atraídos por nuestro planeta cuando se cruza con esta órbita. Cuando estos residuos penetran en la atmósfera terrestre, se calientan y se pulverizan formando el fenómeno visual conocido como estrella fugaz o meteoro. El peligro de impacto es prácticamente nulo ya que estas partículas tienen un tamaño de entre 0.10mm y 1.00mm.

La Luna no facilitará la labor de observación ya que estará en una fase próxima a llena, contaminando así lumínicamente el cielo e impidiendo ver los meteoros más débiles. A pesar de todo, se recomienda observar el fenómeno a simple vista. Desde nuestra perspectiva parecerán radiar de la constelación del Dragón  situada entre la Osa Mayor y la Osa Menor, al norte de la bóveda celeste. Será la lluvia de meteoros más intensa del año. 

*Red Española para la Divulgación de la Astronomía.