Ildefonso Hernández, director general de Salud Pública.

1. ¿Qué ofrece el Sistema Nacional de Salud a quien quiere dejar de fumar?

En la mayoría de las comunidades autónomas, se ofrece el consejo sencillo por parte del médico, pero depende de los recursos de los que disponga cada región. En Navarra, La Rioja y Ceuta se financian las terapias farmacológicas y en Madrid o Catalunya, se hace parcialmente en enfermos graves, embarazadas o profesionales que se consideren modélicas para la sociedad, como sanitarios o docentes.

2. La OMS recomienda una línea telefónica gratuita de carácter nacional. ¿Existe en España?

No, aunque algunas comunidades han instaurado servicios de ayuda en este sentido.

3. ¿Tiene previsto el Ministerio de Sanidad evaluar el impacto de la Ley Antitabaco en indicadores concretos?

Sí. Hemos preparado indicadores para medir el impacto en todos los ámbitos. El primero, en la salud, el objetivo fundamental de la ley. Pero también estudiaremos cómo afecta a la prevalencia y el número de cigarrillos. En tres años, el porcentaje de personas que fuma puede bajar entre el 10% y el 19%. Hay que tener en cuenta que el año pasado la venta de cigarrillos ya bajó un 10%.

4. ¿Cómo cree que afectará la aplicación de la ley a la salud de los españoles?

Según las predicciones que podemos hacer, usando la evidencia científica y la experiencia de otros países, en España se podrán evitar dos o tres ingresos hospitalarios diarios por asma, y entre 15 y 21 por cardiopatía isquémica. El reto es hacer tangible a la población lo que ocurre, porque el que ha dejado de ir al hospital nunca llega a saberlo.