Este artículo se publicó hace 13 años.
La trama que 'blanqueó' 101 aves rapaces
El director de un centro de recuperación, entre los 16 detenidos
Halcones, cernícalos, azores, gavilanes, búhos, águilas... La Guardia Civil ha desmantelado en los últimos días una trama dedicada al expolio de nidos de rapaces protegidas y a la falsificación de documentación y anillas para blanquear las aves robadas. La operación Horus se ha saldado con 16 personas detenidas y la incautación de 101 animales vivos y 11 más muertos en 21 registros realizados en nueve provincias.
Entre los detenidos están el responsable del Centro de Recuperación del Águila Imperial, en Sevilla, José Luis A. R., y el director del Programa de conservación de este ave en Andalucía, Agustín M. M., así como un policía local de Murcia y dos halconeros de los aeropuertos de Bilbao y Ciudad Real. También ha sido imputado un agente medioambiental de la Junta de Andalucía.
Entre los arrestados se encuentran los halconeros de dos aeropuertos
La operación se inició en enero, después de que uno de los cetreros que finalmente sería arrestado presumiera delante de un grupo de personas de que poseía aves robadas en sus nidos. Uno de sus interlocutores denunció lo que había escuchado al Servicio de Protección de Naturaleza (Seprona), que decidió someter a una discreta vigilancia al presunto expoliador de nidos, domiciliado en la localidad de Miguelturra (Ciudad Real).
Estos seguimientos, a los que según avanzaban las pesquisas se unieron pinchazos telefónicos, permitieron constatar como al inicio de la primavera el sospechoso comenzó a salir al campo a localizar los lugares de puesta de las aves y cómo sus relaciones con otros aficionados a la cetrería o a coleccionar rapaces se intensificaban. En las conversaciones, según detalló a Público el capitán José Manuel Vivas, uno de los responsables del operativo, los agentes pudieron incluso grabar en vídeo cómo varios de los cetreros se reunían en el aparcamiento de gasolineras para intercambiar animales y documentos supuestamente falsificados. Por alguno de los animales, podían llegar a pagar hasta 8.000 euros.
De este modo, el Seprona identificó a 13 de los presuntamente implicados en la trama, entre ellos un policía local de Murcia, Antonio G. H., en cuyo domicilio se localizaron más de 1.500 anillas de diversos tamaños y 500 documentos CITES (el pasaporte de los animales en peligro de extinción), con los que supuestamente los arrestados blanqueaban los animales ilegales. En ocasiones, utilizaban los documentos de animales fallecidos, cuyos cuerpos conservaban congelados por si una inspección pedía pruebas de ADN para certificar la validez del pasaporte.
Un policía local de Murcia se encargaba de facilitar papeles falsos' a los animales
Un millón en subvencionesTambién fruto de las intervenciones telefónicas, la Guardia Civil descubrió que entre las personas que mantenían relaciones con los expoliadores de nidos se encontraban dos responsables del proyecto de conservación del águila imperial y un colaborador de ambos, Salvador P. P. Las pesquisas entorno a ellos permitieron comprobar la supuesta implicación de los tres en el robo de huevos y pollos de esta rapaz en el medio natural para llevarlos al centro, donde los presentaban como nacidos en el mismo.
"De este modo presentaban el proyecto científico como éxito, cuando en realidad era una estafa, y podían seguir cobrando las subvenciones", destaca el capitán Vivas. El centro llevaba desde 2002 recibiendo de la Junta de Andalucía por este concepto alrededor de un millón de euros al año.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.