En estos tiempos pandémicos, los centros cívicos se han consolidado como punto de encuentro de la comunidad que los rodea. Con programaciones que se esfuerzan por ofrecer actividades pensadas para todos los públicos, los centros cívicos continúan abiertos y anhelan visitantes. En los centros cívicos se pueden realizar talleres de costura, clases de pilates, grupos de conversación en otros idiomas... y ahora también han logrado un reto nuevo: acercar el arte contemporáneo al grueso de la ciudadanía. Por eso ha nacido el programa Temporals, un ciclo de 10 exposiciones itinerantes que quiere acercar el arte contemporáneo a nuevos públicos.

Los escenarios de esta iniciativa son 13 centros cívicos de nueve distritos de la ciudad de Barcelona, donde aparte de una exposición habrá diferentes actividades para fomentar el diálogo sobre lo que se ha visto con el contexto que rodea a cada espacio; una buena forma de hacer red entre los equipamientos, las asociaciones que los empujan y la ciudadanía. Los centros cívicos que participan son los de Sant Andreu, Joan Oliver "Pere Quart", Can Basté, Casa Elizalde, Navàs, La Farinera del Clot, Cotxeres de Sants, Baró de Viver, Guinardó, Pere Pruna, Convent de Sant Agustí , Pati Llimona y el Casinet d'Hostafrancs.

Cada exposición irá itinerando en cada uno de ellos y se podrá visitar de forma gratuita durante 45 días. El programa completo de exhibiciones y actividades arranca el próximo 19 de enero y se alargará hasta el 9 de enero de 2023. El primer centro cívico en empezar es el de Sant Andreu con la muestra Pasado-mañana, del Colectivo Juan Nadie. La fotografía es el material de trabajo de este colectivo que, como si se tratara de una exploración arqueológica, acumula diferentes imágenes del mismo territorio para crear diferentes significados y multiplicidades de lecturas.

El programa expositivo continúa en el Centre Cívic Pere Quart el 1 de febrero con Memòria roja, donde la artista Àurea Estellé Alsina pone el foco sobre la memoria de las mujeres republicanas durante la Guerra Civil y la posguerra, y evoca las persecuciones, humillaciones y violencias que sufrieron. Este montaje de Estellé Alsina trata de generar nuevas narrativas de un relato hasta ahora sólo escrito por los vencedores de la historia.

Las propuestas que se podrán visitar en estos centros cívicos plantean diversas reflexiones mediante diferentes técnicas y materiales. El visitante encontrará desde diarios fotográficos como el de Román Yñán, quien con Our Garden reflexiona sobre la especie humana y su relación con la naturaleza. Pero también descubrirá trabajos audiovisuales innovadores como On van elles, del colectivo Venecia Flúor, una propuesta para extraer una idea fluida de lo que se entiende como femenino ejecutada con tecnología digital e inteligencia artificial. Otros temas tratados son el miedo y lo que nos separa que es la tesis de la muestra colectiva Cave canem, comisariada por Gerard Galián y con obra de los artistas Fernando Cremades, Mireia Pons, Azahara Cerezo, Levi Orta y Jordi Ferreiro. Y en el sentido opuesto, Pluja Àcida ha trabajado los vínculos forjados con amor y amistad a través de una recopilación de imágenes y saludos virtuales que circulan por las redes.

Uno de los objetivos del Plan de Derechos Culturales impulsado desde el Ayuntamiento de Barcelona es democratizar el acceso a la cultura y la producción cultural, y para ello los centros cívicos son unos escenarios imprescindibles. Puede consultar toda la programación en la página web de los centros cívicos mencionados.