Este artículo se publicó hace 2 años.
¿El principio del fin de la burbuja de los festivales?: cancelan el Diversity y el concierto de Bryan Adams en València
El Diversity Valencia prometía convertirse en su primera edición en uno de los festivales más importantes del verano con un cartel con Iggy Pop, Christina Aguilera, Martin Garrix, Black Eyed Peas y Karol G.
Madrid-Actualizado a
Después de dos años de pandemia, la celebración de grandes festivales de música ha regresado este verano a España con una fuerza inusitada. Es tal la proliferación de eventos musicales que es imposible llevar la cuenta. Cada fin de semana se celebra uno, ya sea en una gran ciudad, en una zona de playa o en la montaña. Los hay para todos los gustos musicales y adaptados a cualquier bolsillo.
Pero esta enorme burbuja festivalera tiene el riesgo de pincharse. La organización de un festival es una labor muy compleja, que conlleva encajar a la perfección multitud de factores. La venta de entradas y la inversión en patrocinios deben sustentar los enormes cachés exigidos por los artistas y lograr que el festival sea viable económicamente.
Hay gigantes que lo soportan todo como el reciente Mad Cool o el Primavera Sound. Y otros que intentan aterrizar con grandes expectativas. Era el caso del festival Diversity que se iba a celebrar por primera vez en la ciudad de València del 21 al 23 de julio en la Ciudad de las Artes y las Ciencias con un ambicioso cartel con grandes nombres internacionales. Sin embargo, la organización acaba de anunciar que el evento se cancela.
El Diversity estaba señalado en rojo como uno de los festivales a tener muy en cuenta. Tenía uno de los carteles más potentes del panorama festivalero para tratarse de un evento a punto de nacier. Se iban a juntar Iggy Pop, Christina Aguilera, Martin Garrix, Black Eyed Peas y Karol G. Los abonos para las tres jornadas de conciertos iban desde los 170 euros el más básico, hasta los 1.200 euros el premium.
"No podemos garantizar la realización del festival bajo las condiciones necesarias para el buen desarrollo del mismo", ha expresado este lunes la organización del Diversity en un comunicado.
Pero no ha sido el único batacazo musical que ha sufrido València en las últimas horas. La empresa promotora del concierto que el canadiense Bryan Adams iba a ofrecer el próximo 19 de julio ha anunciado en redes sociales su cancelación por "imprevistos y problemas en la producción técnica que no garantizan el desarrollo del concierto con la calidad necesaria".
El recital iba a tener lugar en el Auditorio Sur de la Marina de València y llevaba varios meses anunciándose, dentro de la gira que el veterano cantante ofrece este mes por España. La empresa Emotional Events, responsable de este concierto, ha anunciado que comenzará a devolver el importe de las entradas a partir del próximo viernes y durante diez días.
El mundo del rock también ha sufrido los vaivenes de los festivales veraniegos. En el Barcelona Rock Fest que se celebró hace dos semanas, la organización tuvo que sustituir a última hora la actuación del que iba a ser su cabeza de cartel, la banda Manowar, prevista para el 30 de junio. En un intercambio de comunicados, la organización y el grupo se reprocharon mutuamente la falta de entendimiento y la ausencia final de la formación de Joey DeMaio. En su lugar, actuó la megabanda alemana Avantasia.
Otros de los graves problemas de los festivales de música son las precarias condiciones a las que someten a sus trabajadores. Jornadas interminables, accidentes laborales y míseros sueldos son el pan de cada día para los miles de jóvenes contratados de forma temporal para atender las necesidades de estos eventos gigantes. Fruto de esas condiciones y las prisas fue el accidente que se produjo a inicios de junio en el festival O Son do Camiño, en Santiago de Compostela, donde varios obreros resultados heridos al derrumbarse el escenario.
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