Álex de la Iglesia, máximo favorito para los próximos Goya, ha admitido que dudó mucho sobre si presentar su cinta a los premios de este año, dado el cargo que ocupa como presidente de la Academia de Cine. Incluso, ha dicho, pensó en dimitir para poder competir en igualdad de condiciones con el resto de sus compañeros.

La cinta de sátira violenta de De la Iglesia, Balada triste de trompeta, ha obtenido un total de 15 candidaturas,  entre las que se cuentan algunas de las más prestigiosas, como mejor película, mejor director, mejor actor, mejor actriz de reparto, mejor actriz revelación y mejor guión original, entre otras.

El presidente de la Academia ha reconocido que se hace difícil hacer un balance sobre las nominaciones de este año, pero se ha declarado 'orgulloso' del cine español y 'más orgulloso' aún del público que lo sigue.

Tras dar a conocer la lista oficial de candidatos en un casi improvisado acto presentado por Jorge Sanz y Marta Etura, De la Iglesia ha comentado que le gustaría celebrar la gala de 2012 en el Liceu de Barcelona y contar en ella con gente que le 'cae muy bien', como el futbolista Iker Casillas. 

También ha anunciado su intención de convencer al premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa para que este año entregue el premio al mejor guión original -por el que compite él mismo- aunque no sabe si su salud se lo permitirá.

'Me encantaría que Pedro (Almodóvar) y Jose Luis (Garci) vinieran' a la gala del veinticinco aniversario de los premios de la Academia, que este año se celebran de manera excepcional por ese motivo en el Teatro Real de Madrid. Está previsto que dos mil metros de alfombra roja envuelvan la plaza de la Ópera, a la que los invitados accederán en coche por la calle Bailén hasta la estatua ecuestre de Felipe IV.