"Hace mucho tiempo que no meto tortillas de patatas"

A Matías Prats Luque (Madrid, 1950) no le caben las velas en la tarta: 7.000 son demasiadas. Una cifra inabarcable por la memoria –en Antena 3, su actual casa lleva casi 10 años y 2.413 ediciones de informativos– pero respaldada por el reconocimiento de todos. Tanto la crítica como el público le han premiado: cinco premios de la Academia de la Televisión y cuatro TP de Oro son buenos ejemplos.

Siete mil informativos. ¿Qué se siente?

Las sensaciones son idénticas a las de ayer y no cambiarán mañana. Sencillamente, hemos logrado averiguar una cifra que me llena de perplejidad. Me pellizco, sí, pero al margen de una pequeña celebración, todo sigue igual.

¿Llegará el día en que se recuerde a Matías Prats Cañete como el padre de Matías Prats Luque?

Siempre que se hable de él, me agradará muchísimo. Yo he pretendido mantenerme alejado del foco de lo social pero cuando se trata de mi padre entro al trapo por derecho y acudo a la presentación o sarao del que se trate. Sigo guardando un recuerdo entrañable de su figura: un hombre bueno, fiel y digno. Sin duda, se ha ganado su lugar en la historia.

¿Qué relación tiene con Lorenzo Milá, su rival por el liderazgo de las audiencias?

Afortunadamente, nos une una relación de amistad de muchos años. Y todo a pesar de la distancia que provoca esta sana rivalidad, el pugilato que nuestras respectivas cadenas mantienen por el liderazgo informativo. Y, en contra de lo que se pudiera pensar, lejos de separarnos, nos ha unido más.

¿Y se comunican de algún modo cuando se hacen públicas las audiencias?

No, ya no. Al principio, al destronar a La 1 tras su secular primacía, sí que hubo alguna broma o comentario que pusimos en común. Pero ahora, es mejor que no lo hagamos para ahorrarnos algún disgusto innecesario.

¿Los informativos deben vivir bajo la dictadura de las audiencias?

Depende de la cadena. Para la televisión pública, los informativos son el eje central de su programación y de su promoción publicitaria; al menos así era cuando yo estaba allí. Para Antena 3, también comienza a conformarse como un eje básico porque, como cadena privada que es, se nutre de los ingresos por publicidad. Y ser líderes en el apartado informativo puede ser una gran tarjeta de presentación.

¿Cuál cree que es vuestro mayor activo?

No renunciamos a nada. Creo que la clave está en el equilibrio entre el respeto absoluto a la verdad y el tratamiento que se la da a la información. Si te fijas, todas las cadenas ofrecen, de un modo u otro, los mismos contenidos. Nosotros, no lo voy a negar, hemos sido un poco novedosos en la forma de tratar la presentación dándole, digamos, un toque personal.

¿Por qué es noticiable que en un pueblo han hecho la tortilla de patatas más grande del mundo?

Hace mucho tiempo que meto tortillas de patatas (risas). Depende de las informaciones del día. No tenemos porqué encerrarnos en la información más densa y dura, y encontrar un espacio para lo anecdótico. No puedes aburrir al espectador con un producto plúmbeo que invite a cambiar de canal. Suscitar información no está reñido con el entretenimiento. Hay que buscar el sentido lúdico de la información, dulcificar. Lo que no haremos nunca será colocar la tortilla por delante de una noticia valiosa por su interés para el espectador.