El pintor y vidriero barcelonés Joan Vila-Grau, autor de las vidrieras de la Sagrada Familia, ha fallecido a los 90 años, según ha informado su familia en un comunicado. Fue director del Instituto del Vitral de Barcelona y recibió en 2010 la Cruz de Sant Jordi, un premio que otorga la Generalitat a las personas que hayan prestado un servicio destacado en Catalunya. En su caso, fue en reconocimiento a su obra pictórica. "Su contribución al mundo del arte es enorme", ha destacado el Departament de Cultura. 

Vila-Grau estudió en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona de 1950 a 1955, año en que la abandonó para dedicarse profesionalmente a la pintura. A finales de los 50 se interesó por la renovación del arte litúrgico, así como por la mejora y embellecimiento de los edificios a través del arte. 

Vila-Grau fue uno de los máximos especialistas en vidrieras en Europa y escribió varios libros sobre el tema. El artista también fue miembro de la Real Academia Catalana de Bellas Artes de Sant Jordi y la Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona . Interesado por la renovación del arte litúrgico, fue uno de los miembros destacados de la nueva etapa del grupo Ars Sacra, del que formó parte de 1960 a 1974. 

En 1999 recibió el encargo de realizar las vidrieras de la Sagrada Familia, las correspondientes a los ventanales de la Resurrección (2002), de la Luz (2003), del Agua (2004), de la Natividad (2005), incoloros (2006), de las capillas absidales (2009), de la Vida (2009) y de la Pobreza (2010). 

El artista ha destacado sobre todo en el vitral, núcleo de su actividad artística. Su obra está presente en Barcelona, ​​entre otros, en la iglesia de las Hermanitas de la Asunción, Llars Mundet y la iglesia Virgen de la Paz. También trabajó en Sabadell, Sant Sadurní, El Vendrell y Vilafranca del Penedès, entre otras poblaciones de Catalunya. Finalmente, su obra también está presente en toda España e, incluso, en Corrientes (Argentina) y Cincinnati (Estados Unidos).