Detienen a uno de los acusados por la muerte de Liam Payne
El imputado conoció al cantante en un restaurante, donde trabajaba como camarero y al que el músico había acudido a comer. Le acusan de un delito de suministro de estupefacientes a cambio de dinero.
Madrid-
La Justicia argentina ha detenido este viernes a Braian Paiz, uno de los cinco imputados en el caso por la muerte del cantante británico Liam Payne, ocurrida en octubre en Buenos Aires. Paiz estaba acusado del delito de suministro de estupefacientes a cambio de dinero.
El arresto de Paiz fue confirmado por medios locales, que informaron que el joven de 24 años fue detenido en su domicilio tras no haberse presentado ante las autoridades, a pesar de que la semana pasada se dictó una orden de prisión preventiva en su contra. Paiz había conocido a Liam Payne en un restaurante del barrio porteño de Puerto Madero, donde trabajaba como camarero y al que el músico había acudido a comer.
La Policía también se presentó en la residencia de Ezequiel Pereyra, empleado del hotel donde falleció el excantante, y sobre quien recaía una orden de prisión preventiva por el mismo delito. Sin embargo, no lograron localizarlo en el lugar.
Ambos, Paiz y Pereyra, habían sido procesados la semana pasada junto a otras tres personas por el Juzgado Criminal y Correccional 34, que investiga la muerte del excantante de One Direction, quien falleció el 16 de octubre tras caer desde el tercer piso del hotel Casa Sur.
Investigación por la muerte de Payne
Junto a Paiz y Pereyra, también fueron procesados el empresario Roger Nores, Gilda Martín, gerente del hotel, y Esteban Grassi, encargado del establecimiento. Los tres enfrentan cargos por homicidio culposo en relación con la muerte de Payne.
La investigación de la Fiscalía logró acreditar "al menos" cuatro suministros de estupefacientes a terceros, así como otros episodios en los que se le facilitaron consumos adictivos durante la estadía del músico en el hotel, ubicado en el barrio porteño de Palermo.
La autopsia reveló que la muerte de Payne fue causada por "politraumatismos" y "una hemorragia interna y externa", consecuencia de la caída desde el balcón de la habitación del hotel. Se descartaron lesiones autolesivas o la intervención de terceras personas. El informe concluyó que Payne no intentó protegerse durante la caída, lo que llevó a la inferencia de que "pudo haberse precipitado en un estado de semi o total inconsciencia".
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