Un periodista a la caza de los feminicidios de Guatemala

Hace quince años cambió la vida del periodista y fotógrafo Patrick Bard (París, 1958). Junto a Marie-Bertha Ferrer, se marchó a México para realizar una serie de reportajes y allí descubrió la tragedia de los feminicidios de Ciudad Juárez. Bard y Ferrer fueron de los primeros periodistas que informaban en los medios europeos sobre el drama que vivían las mujeres en la frontera entre EEUU y México. La experiencia dio lugar también a que Bard escribiera dos novelas, El norte y La frontera, publicadas ambas en Grijalbo. Aires de McCarthy y Faulkner a la francesa del siglo XXI.

Desde entonces, Bard y Ferrer viajan cada año a Latinoamérica. Sus últimas incursiones han sido en Guatemala, donde también han escrito reportajes sobre numerosos casos de feminicidios. Para Bard, de hecho, es más grave lo que sucede hoy en este país que en México: "Guatemala está olvidada, pero matan a más mujeres que en Juárez", confirma. Y ofrece cifras: desde el año 2000 han sido asesinadas 5.000 mujeres de todas las edades y todas las clases sociales. "Es un país muy violento, cada día mueren entre 20 y 25 personas", añade. A esto se suma la venta anual a EEUU de 5.000 bebés al año, cuyo precio en este horrible mercado no sobrepasa los 50.000 dólares. Esta situación también ha dado lugar a una novela, Huérfanos de sangre, recién publicada en Francia y que, posiblemente, llegue a España en un año a través de Grijalbo.

"Yo quiero hablar de las mujeres como seres humanos"

La frustración de no poder plasmar todo el sistema de violencia y muerte fue lo que hizo que sus crónicas periodísticas se convirtieran en novelas. "La novela negra es una literatura de crisis y de la realidad. Habla de la sociedad, pero en ella también hay literatura", explica Bard. Reconoce que podría quedarse en el ensayo periodístico, pero entonces el relato perdería humanidad: "La literatura es la historia de una persona, mientras que el periodismo se reduce a los hechos. Yo quiero hablar de las mujeres como seres humanos".

Tampoco juzga a sus personajes. Respeta las circunstancias de cada uno y entorno en el que, por citarlo de modo anecdótico, triunfan corridos dedicados a la mujer con títulos como Eres basura. No rechaza su mirada masculina: "Estoy muy involucrado con el tema. Todos somos seres humanos. A la hora de escribir, no hay diferencias entre hombres y mujeres".

El último libro de Bard publicado en España es El perro de Dios', que recrea los crímenes sucedidos en una ciudad del sur de Francia en 1765. Allí, sin aviso, comenzaron a aparecer asesinados niños y mujeres. Nadie supo nunca quién lo hizo. "Aquel fue el primer suceso hipermediático de la historia de la prensa", asegura, un siglo antes que los crímenes de Jack El destripador'. Para Bard, hubo implicación política: "La Iglesia declaró que los campesinos tenían la culpa y fue una de las mechas que encendió la revolución francesa".