La sopa de col con ternera es un plato fácil de preparar y perfecto para los días de invierno, cuando aprieta el frío. Comida de montañeses, nutritiva y reconfortante, se prepara con col o repollo y unos trozos de ternera para guisar (mejor si son melosos y con un poco de grasa). También puede hacerse con ternera en conserva (tipo británica) o utilizando jamón o lacón en su defecto.

Lo único importante es elaborar una sopa muy sabrosa que pueda acompañarnos durante los días recios del invierno y que, además, sea saludable. El caldo puede llevar también un poco de arroz o pasta, que se añaden siempre al final de la cocción para que no se pasen.

Sella la ternera:

Seca los tacos de ternera con papel de cocina y salpimiéntalos.

En una olla grande, calienta el aceite y dora la carne a fuego medio-alto hasta que coja color por todos lados.

Retira la carne y reserva.

Haz el sofrito:

En la misma olla, baja a fuego medio y añade el puerro/cebolla y el ajo. Sofríe 5-7 minutos.

Añade la zanahoria y rehoga un par de minutos más.

Incorpora el tomate (si lo usas) y cocina unos minutos para que pierda acidez.

Prepara el caldo: 

Retira la olla un momento del fuego, añade el pimentón, remueve rápido para que no se queme y vuelve a poner al fuego.

Devuelve la carne a la olla con sus jugos, añade la hoja de laurel y cubre con el caldo (o agua) hasta sobrepasar bien todos los ingredientes.

Lleva a ebullición, desespuma si hace falta, baja el fuego y cocina tapado a fuego suave 45-60 minutos, hasta que la carne empiece a estar tierna.

Incorpora la col y las patatas:

Añade la col en tiras y las patatas en cubos.

Ajusta de sal y, si hace falta, añade un poco más de agua o caldo.

Cocina a fuego medio-suave 20-25 minutos más, hasta que la col y las patatas estén tiernas y la carne muy suave.

Apaga el fuego y deja reposar la sopa 5-10 minutos.

Sirve caliente, con un poco de pimienta recién molida por encima.